30

Ene

2012

El análisis cinematográfico en la era digital

Por Alejandro Machacuay Arévalo

Por Julio Talledo. 30 enero, 2012.

La tecnología digital ha cambiado la forma de ver cine. Hoy se pueden apreciar  películas no solo en salas de cine sino también en la casa, en colegios, en centros culturales, en la universidad, etc. Esto gracias a que están grabadas en soporte digital: el más popular el DVD. Además, los nuevos modelos de reproductores, proyectores, televisores y equipos de sonido permiten que la imagen y el sonido alcancen una calidad nunca antes lograda.

El DVD permite la difusión de innumerables títulos de obras cinematográficas de distinta procedencia: las hollywoodenses, europeas, asiáticas y latinoamericanas. También podemos ver obras maestras de la historia del cine restauradas y remasterizadas.

Podemos decir que hoy se ve más pero se mira menos cine. Solo en algunos casos o espacios   públicos se reflexiona sobre una obra través del denominado cine fórum o en clases de cine. En estas actividades o en otras donde se discute sobre los films que se proyectan se suele recurrir a los “críticos de cine” para orientar la apreciación o discusión de una obra cinematográfica.

Asimismo, podemos encontrar -en distintas publicaciones- infinidad de críticas cinematográficas sobre cualquier película que se quiera ver.  Esto es positivo, pues permite a muchas personas acercase al fascinante mundo del arte audiovisual. Sin embargo, es oportuno mencionarlo, son pocas las críticas que valen la pena considerar, principalmente porque: a) ahora cualquier persona puede ser “crítico”; b) las críticas se hacen de manera apresurada y se plasman en textos de corta extensión sin apoyo metodológico ni base teórica; c) es una actividad personal sujeta exclusivamente al criterio y gusto del autor de la crítica.

Es en este terreno, en donde el ámbito académico y universitario puede contribuir a una reflexión seria y profunda del cine a través del denominado análisis cinematográfico, no se trata de subestimar la crítica, pues hay buenos críticos; algunos provienen del ámbito académico. Además, su práctica puede ser un ejercicio intelectual tan válido como la práctica del análisis cinematográfico.

Tecnología digital  y análisis cinematográfico
Si afirmamos que la tecnología digital está permitiendo que se consuma más cine y si destacamos la gran influencia del séptimo arte en la sociedad, el análisis cinematográfico juega un papel importante en el estudio del fenómeno cinematográfico y, de manera indirecta, en la tarea de guiar a los espectadores por el camino de la adecuada comprensión de una obra de cine.

Además, la misma tecnología digital ofrece la posibilidad de desarrollar el análisis cinematográfico, que como sabemos debe ser riguroso, profundo y puesto en práctica en el ámbito académico. Las universidades en general, y las facultades de comunicación en particular, deben ser conscientes de esta oportunidad para contribuir al estudio del fenómeno cinematográfico desde una perspectiva científica.

Un elemento importante en esta práctica es el formato digital de video DVD que, según algunos especialistas, está “reescribiendo la historia del cine”. El DVD se ha convertido en una herramienta importante para esta práctica. Títulos actuales, títulos antiguos, clásicos del cine, packs de grandes directores se convierten en una oferta de temas para estudiar y analizar.

El DVD permite al investigador ver la película una y otra vez: contar cuántos planos tiene una escena, cuántas escenas tiene un secuencia, los tipos de planos, ángulos; también se puede congelar una imagen para estudiar el encuadre, la composición, transcribir los diálogos. Es decir, se puede –literalmente- descomponer y componer una película.

Por ello, no es raro encontrar libros, generalmente de procedencia europea, que ofrecen análisis  cinematográficos de películas fundamentales  de la historia del cine cuyos autores son académicos no solo del ámbito de la Comunicación audiovisual sino también de la Filosofía y la Educación. Asimismo, estudiantes universitarios realizan esta práctica como trabajo de investigación de tesis.

El microanálisis
El experto español de cine, Santos Zunzunegui, ha demostrado que es posible abordar el estudio de un filme (y por extensión del cine en su conjunto) a partir de fragmentos mínimos extraídos de una obra concreta: es lo que él llama el microanálisis fílmico. “Pequeños fragmentos – dice- micro secuencias susceptibles de ser observadas bajo el microscopio analítico y en las que se pueda estudiar la condensación de las líneas de fuerza que constituyen el filme del que se extirpa”.

El microanálisis ofrece grandes ventajas para el estudio del cine: al analizar sólo fragmentos de películas (sin que esto signifique menor rigor) se necesita -para su publicación en un medio impreso- menos espacio y, en consecuencia, menos costos. De otro lado, hay un ahorro en el tiempo dedicado al estudio, en comparación al utilizado cuando se analiza un film en su totalidad.

Otra ventaja del microanálisis es poder aprovechar (otra vez lo digital) la Internet para publicar los posibles análisis. Resulta diferente plasmar un análisis cinematográfico en papel que hacerlo en una pantalla. Lo novedoso aquí es que, además de incluir fotogramas a color (por cuestión de costos en la mayoría de libros especializados sólo se pueden ver en blanco y negro), se pueden incluir fragmentos en video de la película. Esto último es una gran ventaja para el análisis cinematográfico porque se logra que el producto analizado sea atractivo sin dejar de ser riguroso. Así se cumpliría lo que dice Zunzunegui: “romper la muralla entre el analista y el lector (en este caso el espectador), proporcionando instrumentos operativos para todos aquellos que conciben el cine como territorio donde SABER y PLACER no sólo no están reñidos sino que se refuerzan mutuamente”.

Finalmente, el microanálisis puede servir para estudiar no solo fragmentos de películas sino también otros textos audiovisuales enteros pero al mismo tiempo son breves. Esto representa una gran oportunidad para el estudio de dos productos audiovisuales que se “consumen” a diario pero que casi no se analizan: las noticias de televisión y los spots publicitarios. Su corta duración los hacen objetos de un estudio relativamente de fácil manejo. Incluso se pueden grabar en distintos formatos de video para luego analizarlos plano por plano, en cada uno de sus detalles de fondo y forma. Los resultados pueden ser sorprendentes.

Docente.

Facultad de Comunicación.

Universidad de Piura

Artículo publicado en el suplemento SEMANA, diario El Tiempo, domingo 29 de enero de 2012.

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