La labor del líder de una organización se ve reflejada en el grupo humano al que dirige, es decir, en los resultados obtenidos del conjunto.

Por Juana Huaco. 02 julio, 2018.

Ya nos hemos referido a la labor de los directivos en las organizaciones, definiendo su proceso administrativo. Una vez establecidas, para lograr sus objetivos,  deben contar con alguien que haga “cabeza”, que sea el “capitán” del barco para que guíe su rumbo hacia “buen puerto”.

Parece una tarea sencilla, sin embargo, en la mayoría de los casos, no lo es. Si  lo fuera, las condiciones empresariales y de desarrollo, no solo en la región sino también en nuestro país, serían diferentes. Y, es que es un concepto tan elemental y simple y, a la vez, tan difícil y escaso de encontrar.

Cualquier organización es una organización humana: un conjunto de personas que quieren lograr algo. Para ello, necesitan de alguien que les indique cómo lograrlo. Ese “alguien” es el líder, el responsable de que las cosas se cumplan de acuerdo a lo planificado. A la vez, la labor del líder se ve reflejada en el conjunto humano al que dirige; es decir, en los resultados obtenidos.

Contar con líderes en las empresas o instituciones es fundamental para la tarea directiva en las organizaciones. Pero, estos deben saber direccionar a su equipo humano, lograr que hagan las cosas bien, de acuerdo a lo establecido, y porque quieren hacerlo.

De este trabajo conjunto, resulta una mayor competitividad empresarial, consistencia y sostenibilidad en el tiempo, con el crecimiento y desarrollo que todos buscan. Trasladando el concepto a nuestra Región, si Piura está perdiendo competitividad, ¿no será que está faltando más liderazgo en nuestras organizaciones públicas y privadas?

Comparte: