Además, deben evitar realizar actividades no esenciales pues fomentan los contagios del virus, indica el médico Vladimir Bustinza, profesor de la Facultad de Medicina Humana.
Por Betsy Salazar. 26 febrero, 2021.El Ministerio de Salud informó que, en los primeros días del 2021, se generó un aumento de casos positivos por coronavirus en la población joven. Las cifras crecieron en un 110% comparado con las últimas semanas del 2020. Sobre ello, Vladimir Bustinza, profesor de la Facultad de Medicina Humana, explica por qué en esta segunda ola los jóvenes son más vulnerables al virus y cómo deben reforzar los cuidados para evitar más contagios.
Según un informe del Imperial College de Londres y otros grupos científicos, refiere Bustinza, la nueva variante del coronavirus que surgió en el Reino Unido es hasta 70% más transmisible y afecta en mayor proporción a personas menores de 20 años. Incluso el estudio demostró que las medidas de distanciamiento social que funcionaron contra cepas anteriores del virus fueron insuficientes para controlar la propagación de la nueva variante.
Asimismo, refiere que es posible que parezca que la nueva variante del virus afecta más a los jóvenes porque la investigación se realizó en un momento en que había confinamientos, pero los colegios seguían abiertos y este grupo de edad estuvo más expuesto al virus.
En cuanto a los síntomas, los pacientes presentan la sintomatología habitual en la infección por COVID-19: temperatura igual o mayor a 38 grados, molestias en la garganta, pérdida del olfato o gusto, malestar corporal y dificultad respiratoria y dolor de cabeza.
Por ello, el médico aconseja que los jóvenes sigan reforzando las medidas sanitarias de autocuidado ya conocidas: lavado frecuente de manos, uso de mascarillas, distanciamiento social, evitar los lugares concurridos, espacios cerrados, entre otras. Además, deben disminuir la realización de actividades no esenciales ya que esto puede contribuir a la reducción de los contagios y los efectos psicológicos en niños, adolescentes y jóvenes, causados por las cuarentenas y aislamientos prolongados.
“La ansiada meta de la reapertura de colegios y universidades para dar un nuevo impulso a la educación dependerá de las políticas a implementar y de la colaboración de todos los sectores de la sociedad”, indica.
Cuidados y alimentación
Bustinza sostiene que los pacientes que presenten algunos de los síntomas del virus deben acudir al establecimiento de salud más cercano, realizar el aislamiento domiciliario y evitar la automedicación, esta última es una de las medidas necesarias y de vital importancia para la recuperación plena del paciente.
De igual modo, el profesor destaca la labor de los agentes comunitarios de salud que comprometidos con su trabajo pueden ayudar a la prevención e identificación de los casos de COVID-19 según su gravedad, guardando siempre las medidas de bioseguridad correspondientes.
En cuanto a la alimentación, indica que si bien ningún alimento en especial puede prevenir o curar la infección por COVID-19, es conocido que la alimentación balanceada ayuda a que el sistema inmunológico prevenga y combata las infecciones en general. “Esto se puede acompañar de buenos hábitos como el ejercicio que evita la aparición de enfermedades crónicas”, agrega.
