Lo rutinario cansa. El trabajo genera tensión y las preocupaciones cotidianas, ansiedad, casi para todos. Entonces, acumulamos un alto nivel de estrés por lo que buscamos la manera de huir, pero, por lo general, el contexto urbano no nos da una vía de ‘escape’, más bien, nos produce más cansancio mental.

Necesitamos contar con espacios de esparcimiento con los cuales podamos establecer una relación directa, para comprender el contexto al que pertenecemos.

Para crearlos, no existe una fórmula. Hace falta un complejo análisis urbano que se compone de diversos factores y hasta el más pequeño detalle puede generar el mayor impacto. Se requiere de un estudio exhaustivo del contexto en el cual intervendremos para así poder dar la mejor respuesta, crear el mejor espacio.

En este sentido, es necesario contar con los suficientes conocimientos de planificación urbana para tener en cuenta cada uno de los detalles.

En el programa de Arquitectura, la creación de estos espacios en zonas urbanas y rurales es parte de su misión y de nuestra formación, pues, es también una herramienta para ayudar a mejorar la calidad de vida y fomentar hábitos saludables en las personas.