“Mi papá fue uno de los benefactores de esta Universidad y, a pesar de que yo no estudié aquí, porque fue creada tres años después de cuando culminé la Secundaria, siempre he tenido bastante contacto con la Universidad de Piura, la he seguido paso a paso desde sus inicios. Con sus 50 años, tiene y ofrece unos principios cristianos importantes, los cuales la diferencian de tantas universidades que existen ahora. Es importante tener en cuenta que la UDEP no tiene como fin el lucro, sino la formación de sus alumnos”.

*Hijo de don Juan Helguero Checa, uno de los donantes del terreno de la UDEP.