¿Yo abolo? ¿Le garanto?
Por Nelly Trelles, publicado el 2 de marzo de 2012He aquí algunos de los verbos llamados defectivos debido a que por diferentes razones –semánticas, sintácticas o fónicas– tienen –o mejor dicho tenían– una conjugación incompleta, es decir, que restringían su uso a las formas cuya desinencia comenzaba por -i- (abolimos, agredieron, transgredieron, etc.).
Pues bien, según el nuevo Diccionario Panhispánico de Dudas (2005) en el uso del español actual, los verbos antes mencionados han extendido su empleo a todos los tiempos y personas de la conjugación y las formas consideradas antes incorrectas –por no ser agradables al oído– (abolo, aboles, agredo, agraden, transgreden, etc.), son hoy normales en el ámbito hispanohablante.
En cuanto al verbo balbucir, defectivo también ya que no se usa en la primera persona del singular del presente del modo indicativo y subjuntivo (*balbuzco, *balbuzca); formas que se suplen con el verbo balbucear (yo balbuceo, que yo balbucee).
Esta misma limitación la tiene el verbo garantir (parece que sí es usado en Argentina y Uruguay) felizmente, de uso poco frecuente en el español actual, puesto que ha sido sustituido por el verbo garantizar. Se emplea en todas las formas de la conjugación, es decir, también ha dejado de ser defectivo: Le garanto (o garantizo) que le haremos un descuento.
Otros verbos, tales como atañer, concernir, acontecer, acaecer, holgar, ocurrir, etc. por motivos sintácticos y semánticos, también son y serán defectivos, ya que solo pueden predicarse de sujetos inanimados y abstractos y, por lo tanto, solo pueden usarse en tercera persona (Este asunto atañe / concierne a los padres, Acontece cada año, El hecho acaeció en 1999, Ocurre cada día, Huelgan las palabras, etc.), pero no en la primera ni en la segunda personas referidos a los agentes de la comunicación (No podríamos decir: *Yo ataño…, *Tú acaeces, *Juan concierne…).
Algo parecido, por distinto motivo, ocurre con los verbos llover, amanecer, anochecer, etc. que se refieren a fenómenos de la naturaleza –salvo el uso en sentido metafórico: Amanecí en Lima– y solo se emplean en tercera persona, sin sujeto gramatical (Llueve todas las madrugadas, Amanece temprano).
Buen comienzo
Por qué suena tan grotesco decir “de un pronto a otro”
Yo creo que el verbo acontecer sí se puede emplear en segunda persona, y quizá en primera, pero solo de un modo poético: decir “tú aconteces” podría ser una manera de ensalzar el modo en que una persona aparece en la vida de otra, por ejemplo. Se trata solo de una observación. Gracias por el artículo.