¡Aguaita!… “¡Nos están aguaitando!”
Por Claudia Mezones, publicado el 18 de abril de 2012No nos suena nada raro esta expresión ni otras como: “Aguaita esto, está interesante” o “Te voy a aguaitar dentro de un rato”; y, seguramente, nos llamaría la atención que nos dijeran anticuados por usar la palabra “aguaitar”.
En la caracterización lingüística del español de América, existe un inventario de voces llamadas “arcaísmos”. El Diccionario de la Lengua Española (2001) los define como ‘elemento lingüístico cuya forma o significado, o ambos a la vez, resultan anticuados en relación con un momento determinado’. En efecto, un arcaísmo es un término que aún se habla en América conservando su forma o su significado original pero que en el español peninsular ha dejado de usarse o ha adoptado otro significado. “Aguaitar” es uno de ellos.
Aunque algunos asocian su origen con el verbo inglés “to wait”, por su significado de ‘esperar’, etimológicamente el término coloquial “aguaitar” proviene del catalán “guaita” que significa ‘vigía, centinela’. Actualmente en esta lengua, “aguaitar” se usa con el significado de ‘esperar’, con más frecuencia con el de ‘estar atento’, ‘estar al tanto o vigilando’, ‘estar al acecho’ e, incluso, en expresiones con matiz de sorpresa: ¡Guaita, quina sorpresa! (‘¡Mira/fíjate/vaya, qué sorpresa!’). Según Martha Hildebrandt (1994), “aguaitar” ingresó al léxico del español americano junto con otros términos del habla marinera que llegaron en la colonización. “Guaita” para los marineros catalanes era cada uno de los turnos de guardia nocturna y de este derivó el verbo “aguaitar” que, al parecer, no arraigó en los dialectos romances peninsulares alrededor del siglo XVII.
Si bien para muchos americanistas es un arcaísmo, el diccionario académico actual no lo considera como tal y lo recoge con acepciones de uso general: ‘cuidar, guardar’, ‘acechar, aguardar cautelosamente’, ‘mirar, ver’, ‘atisbar, espiar’, pero solo con una de uso hispanoamericano: ‘aguardar, esperar’. Aunque en zonas de Centroamérica y las Antillas se usa con este último significado, en Perú, Colombia, Venezuela, Ecuador, Chile, Bolivia y Argentina tiene también el de ‘mirar’, ‘vigilar’, así como el de ‘estar al acecho’ (registrado por María Moliner en su Diccionario de Uso del Español); así, encontramos las expresiones: “Cuentan mis hermanos que ellos lo salían a aguaitar y le robaban la carne” (CORDE, Chile, 1986), “Que no van a aguaitar ni el rastro de mis chacaretas” (CORDE, Venezuela, 1988).
En Perú, el uso de “aguaitar”, en los distintos estratos socioculturales, se está generalizando cada vez más con el significado de ‘mirar, ver’: “¡Aguaita, mira, qué chica para más bonita!”; “Aguaita esto, lo bajé de Internet”; “Aguaita ese loco, de dónde salió”. Los diccionarios de piuranismos de Esteban Puig y de Edmundo Arámbulo coinciden en su acepción de ‘mirar con curiosidad’ y ‘estar al acecho’: “Mi abuelita está aguaitando a la Rosa que no llega”. En cuanto a su forma, la vacilación entre “aguaytar” y “aguaitar” se explica porque la primera conserva su escritura arcaica mientras que la segunda evolucionó al español moderno. Entre los siglos XIV y XVII, cuando la lengua española aún no había alcanzado su madurez, se escribía “aguaytar”, forma con la que habría llegado a América y se ha ido heredando tras generaciones de hablantes conservadores.
Asimismo, en el habla peruana no es usual la palabra derivada “aguaitador” con el significado de ‘el que aguaita o le gusta aguaitar’ (que, curiosamente y a diferencia de “aguaitar”, el diccionario académico sí registra como voz arcaica): “Bien aguaitador, eres”; sin embargo, otros derivados como “aguaitada”, “aguaitadita” o “aguaite” resultan menos extraños: “Dale una aguaitadita al bebe” (‘míralo’), “Estate al aguaite” (‘estate al pendiente’).
Así pues, no es que hablemos anticuadamente sino que los hablantes americanos hemos sido capaces de mantener vivos este y otros términos, como acalenturado, frazada, crespo, lindo, utilizados en el español de la Edad Media y del Siglo de Oro.
Pienso que mas bien viene del verbo en ingles “await” (de await, aguaitar).
Saludos,
Rosi
Me parece muy interesante este tema… la forma que tenemos de hablar en sur américa y los países conquistados por españoles. Somos una mezcla de costumbres y formas de hablar curiosas, muy curiosas….mmm!
Yo, en adición a esas acepciones dadasde aguaitar, entiendo — principalmente— que aguaitar es mirar algo de forma furtiva, o subrepticia, como por ejemplo cuando alguien a través de la rendija de una puerta esta viendo lo que ocurre dentro de la habitación. O un ladrón que en pleno robo se pone de “campana” y a través de un orificio o rendija o abertura pequeña aguaita a ver si viene la policía. Si alguien, abiertamente, me mira o ve algo, difícilmente se podría decir que esta “aguaitando”. Por ejemplo, el ladrón, una vez capturado dando su manifestación en la comisaría frente a un policía, no esta aguaitando al policía que lo interroga, lo ve o lo mira, pero no lo aguaita. Tampoco no se podría decir que el público asistente a un estadio, sentado en la tribunas, este “aguaitando” el partido de fútbol que se juega en el estadio. Igual cuando uno va al cine a ver una película, no se dice que este “aguaitando” la película y si una familia está en la mesa comiendo, unos frente a otros, tampoco se podría decir que se están aguaitando entre ellos. Me agradaría un comentario al respecto.
Estoy totalmente de acuerdo contigo!
Aguaitar; del verbo aguaita, ver con cautela
Jaja pero te está diciendo que no viene del inglés :v
En Colombia es un término usado en imperativo -aguaita o agueita- y por lo general usado más bien en el campo con el sentido de mira en situaciones de asombro.
En rioplatense jamás escuché/leí “aguaitar”. “Guaita” en cambio si, con los significados de tener cuidado, alerta o esperar. Pero es de muy raro uso. Por ejemplo: ¡guaita la cana! (cuidado la policía) o ¡guaita que eso es peligroso!. O incluso con el significado de esperar, en segunda persona s: guaita (ante la insistencia de una persona que interrumpe).
Yo me e alegrado mucho,pues crecí escuchando esa palabra.Y es k es un Piuranismo, aunque algunos opinan k es una deformación de una palabra Quechua.
En la zona sud de Cataluña se sigue usando esta palabra con el significado, de mirar, ver y de cuidado, prestar atención por algo. Así que efectivamente viene del Catalán.
Cito la última estrofa del poema de César Vallejo “Lìneas” de so poemario “Los heraldos negros” (1918)
….
Y después…La otra línea…
Un Bautista que aguaita, aguaita, aguaita…
Y, cabalgando en intangible curva,
un pie bañado en púrpura.
¡Gracias!
Comparto esta zamba donde se usa:
LA HUARMILLITA – Bailecito
Letra: Jaime Dávalos
Música: Eduardo Falú
Dónde andará mi chura, por esa puna
Sola solita
Con la pollera al viento, tras la majada
Carihuarmita.
Voy enterando el año, bajé al ingenio
Pa´la cosecha
Ojalá no se canse, tanto aguaitarme
Hasta que vuelva.
Estribillo
para que no la olvide
Me dio su anillo de filigrana,
Le dejé de recuerdo mi poncho puyo
Sobre su cama,
Tra la la laira, la la la laira
Le dejé de recuerdo mi poncho puyo
Sobre su cama.
Si me parece verla, cuando me duermo
Pelando caña,
Pegadita a mi sombra con su presencia
Que me acompaña.
Ay, achalay mi chura, tan querendona
Tan alhajita,
Llevo en el pensamiento grabada a fuego
Su figurita.
aguaitar es observar sigilosamente, o sea acechar, atisbar, espiar. el catalán guaitar, el italiano guaitare i el inglés wait proceden del latín.
En Colombia he escuchado esa palabra en zonas rurales, y muy apartadas de las grandes ciudades
Los que mira televisión en el celular no la ven, sino la agueitan (si es que está bien la forma del verbo?)
“Aguaitar” es catalanismo junto a “rayola” o “rajola” en vez de baldosa o azulejo. No es arcaísmo, porque se utiliza todavía en Latinoamérica.
Saludos y aplaudo mucho los comentarios. En Lima se usa pero por gente que ha vivido de muchas generaciones allí y digo esto por que cuando lo he usado yo a gente que viene de provincias o son hijos nietos de provincianos y me quedaban mirando algo sorprendidos y me preguntaban que significaba esa palabrita rara.
Al momento de escribir este comentario, entre un grupo de amigos peruanos preguntaron si en mi país que es Chile usaban ese término, de sorpresa busqué en internet y encontré esta página… y al momento de leer el origen, me quedé gratamente sorprendida, ya que tengo ascendencia catalana y no por falta de interés no he interiorizado en mi lengua paterna, sino ya habría descubierto lo anteriormente citado con muchos años de anticipación. Saludos y muy buena explicación.