Duda resuelta: Desaparición de la d y la s en las formas imperativas
Por Castellano Actual, publicado el 23 de noviembre de 2016Pregunta de Gonzalez (Francia):
Buenos días.
Me gustaría saber qué evolución del idioma provocó la desaparición de la d y la s en las formas imperativas como: ¿levantaos o levantémonos?
Gracias por su respuesta
V. Gonzalez
Respuesta de Castellano Actual:
Estimado lector:
La evolución del imperativo en su paso del latín al castellano no sigue los mismos derroteros que los tiempos de los demás modos (indicativo y subjuntivo). En realidad, la única forma que sobrevive en el paso del latín al castellano es la segunda persona del singular del imperativo de presente. Así, de amate (2ª persona del singular del imperativo de presente), se pasa a amade (por la natural tendencia a la relajación articulatoria que hace que el fonema dental oclusivo sordo [t] sonorice dando [d]). Después, ya a partir del siglo X, y por influencia del francés, se pierde la vocal anterior media [e], dando amad. La segunda persona del plural castellana procede de la adición enclítica del pronombre os, que procede del pronombre personal de segunda persona latina en su forma de acusativo plural vos. De esta forma, se crea el par (ama tú/ amaos vosotros).
Debido a que en realidad el imperativo tiene en castellano tan solo formas en la 2.ª persona, se ha empleado en muchas ocasiones el infinitivo (amar) e incluso con el mismo pronombre enclítico para el plural (amaros). Sin ser una forma incorrecta, sí podríamos decir que su uso es absolutamente innecesario, ofreciendo el castellano una forma como amaos que es desde su origen la forma propia del imperativo en plural.
Por otro lado, el imperativo posee ciertas limitaciones distribucionales. No es posible usarlo en oraciones interrogativas ni negativas. El primer caso es comprensible, porque preguntar una exhortación resulta contradictorio e incongruente. En el segundo caso (Salta tú / No salta tú*), la limitación distribucional se subsana con el uso del presente de subjuntivo: Salta tú / No saltes tú*; confiaos/ no confiaos* debería ser: confiad /no os confiéis.
En las zonas en las que no se emplea la segunda persona peninsular (español de América principalmente), se tienden a emplear las formas del presente de subjuntivo.
Saludos cordiales,
Castellano Actual