El hipocorístico Pepe
Por Castellano Actual, publicado el 19 de abril de 2013Si alguien ha tenido un tío de nombre José, seguro que durante su infancia lo ha llamado, con naturalidad, tío Pepe, y jamás se le pasó por la cabeza el porqué de este apelativo hasta que de pronto otra persona del mismo nombre dice: “No me llamo Pepe, sino José”.
Tenemos, pues, que Pepe es un antropónimo, del tipo de nombres de pila y de una clase especial llamada hipocorístico; que según la Nueva gramática de la lengua española. Manual (2010: 219) es “una forma abreviada que se usa en la lengua familiar como designaciones afectivas”: Lola, Paco, Pili, Tere; sin embargo, aquí no se dice nada respecto al origen de dicha palabra.
La versión más difundida es la que explica que cuando se leía el Nuevo Testamento al referirse a San José, los lectores añadían la frase “Pater Putativus” (palabra derivada del latín “putare” que significa ‘pensado’, ‘considerado’; a este se le añadía el sufijo “ivus” que forma los adjetivos de posibilidad pasiva); por ende, la frase latina antes mencionada, sería “supuesto padre” y se usaba para aclarar que San José no era el padre biológico de Cristo. Con el tiempo esta frase se simplificó a P. P. y en la liturgia se leía “Santus Iosephus P. P. Cristhi” y las personas que no conocían tal significado identificaron el “Pepe (P-P)” con el segundo nombre de San José.