Los cronónimos en Semana Santa
Por Nelly Trelles, publicado el 14 de abril de 2014
La Semana Santa se inicia con el Domingo de Ramos. Hoy iniciamos este tiempo tan significativo para los cristianos. Aprovecharé este periodo para hablar de los llamados cronónimos, es decir, de los nombres propios que designan, individualmente, espacios de tiempo a los cuales se les ha dotado de un nombre específico, por ejemplo: Edad Moderna, Renacimiento, Siglo de Oro, Navidad, Cuaresma, etc.
La clasificación de los sustantivos en comunes y propios es de las más conocidas. De acuerdo con la Nueva gramática de la lengua española (2009), los sustantivos comunes designan a los seres sin distinguirlos de los de su especie; y los propios los designa individualizándolos; así, chico, perro, espada, viernes, etc., son comunes. Los propios, particularizan, tienen carácter connotativo; e incluso, para algunos gramáticos, carecen de significado: Raúl, Boby, Colada, Viernes Santo, etc. Podría decirse que el sustantivo común designa la clase, la especie y el propio, el individuo. A veces surge el problema de no saber cuándo un sustantivo es común o propio, pues resulta que hay sustantivos comunes que se convierten en propios y viceversa: Ya llegó la Cual de México, Es un herodes. Desde el punto de vista sintáctico son nombres propios, en sentido estricto, los antropónimos, los de entidades, los de seres sobrenaturales y fantásticos, los de plantas y animales, los de objetos, los topónimos y algunos cronónimos.
En la lengua escrita los sustantivos propios se escriben con letra inicial mayúscula. Respecto a los cronónimos, según el nuevo manual de Ortografía (2010), solo se escribirán con mayúscula los sustantivos que designan los días de la semana, los meses y las estaciones cuando formen parte de expresiones denominativas que así lo exijan, como festividades, fechas históricas, etc. Después de dar diferentes ejemplos de festividades sostiene que esta misma mayúscula se aplicará a los nombres de los periodos litúrgicos o religiosos.
En el caso de Semana Santa, nos referimos con este nombre al periodo que comprende los días de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, dentro de los cuales recordamos una serie de sucesos. Así, se inicia con el Domingo de Ramos porque recuerda la entrada triunfal de Jesús aclamado con palmas y ramos de laureles. Son nombres propios también Jueves Santo y Viernes Santo; pero no, lunes, martes y miércoles santo. También se considera como nombre propio Sábado Santo o Sábado de Gloria, que junto con el Viernes Santo y Domingo de Pascua o Domingo de Resurrección, constituyen el llamado Triduo Pascual.
Nelly Trelles Castro
Universidad de Piura
Interesante comunicación, tan explícita cuanto ad hoc para el presente lapso, como se enfatiza en el encabezado, ciertamente.
Saludos.
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