Los pluralia tántum
Por Eliana Gonzales, publicado el 27 de abril de 2022Pluralia tántum es la forma castellanizada para referirse a aquellos sustantivos que se construyen solo en plural: víveres, exequias, añicos, nupcias, represalias… Así, no es correcto decir, por ejemplo, *El señor recibió un vívere. Es probable que dicho señor haya recibido solo un paquete de fideos o una bolsa de arroz, pero sea lo uno o sea lo otro se tendrá que decir El señor recibió víveres. ¿Por qué? Porque este uso, solo plural, no guarda relación con la propia realidad (un paquete o una bolsa), sino con la estructura interna de nuestro propio sistema lingüístico, de ahí que a estas formas también se las conozca como plurales inherentes. En la Nueva gramática de la lengua española (2009, p. 172) se recoge al respecto: «No se debe, pues, buscar en la realidad misma la justificación de que la lengua exprese con plural nociones como gárgaras, víveres o zarandajas». Dicho de otro modo, no se sabe la razón exacta de su uso en plural.
Dentro del grupo pluralia tántum están algunos alimentos (tallarines, mollejas, picarones, ñoquis…); pero también algunos términos referidos a los propios alimentos (víveres, comestibles, provisiones…). Si bien son los más comunes, podemos incluir asimismo algunas palabras relacionadas con el matrimonio (nupcias, esponsales…); con el dinero (fondos, dietas, emolumentos, honorarios, haberes…); con distancias alejadas (afueras, alrededores, exteriores…); con manifestaciones de afecto (arrumacos, mañas …); con la cortesía (ánimos, saludos, gracias, parabienes, modales…); con objetos indeterminados o indefinidos (cachivaches, útiles, trastos, enseres…); con restos o fragmentos (añicos, trizas, residuos…); y con ciertas partes de algunos organismos (entrañas, fauces, sesos, tripas…).
Puesto que se comportan como sustantivos no contables; es decir, como sustantivos que no pueden segmentarse, los pluralia tántum no aceptan numerales, sino más bien determinantes indefinidos (varios fondos, bastantes tallarines, muchos enseres) y cuantificadores comparativos (más provisiones, menos picarones). Algunos incluso reciben las formas cuántos y cuántas exclamativas (¡Cuántos saludos he recibido por mi cumpleaños!) e interrogativas (¿Cuántos saludos recibiste por tu cumpleaños?). Sin embargo, conviene aclarar que se han registrado casos de uso como sustantivos contables (Véndame cinco mollejas para mi sopa, Solo quiero dos picarones); incluso el Diccionario de la lengua española (actualización 2021) recoge algunas formas en singular (gárgara, zarandaja, comestible, provisión, fondo, dieta…) con la indicación «usado más en plural».
Por otro lado, si bien hemos mencionado casos escritos en una sola palabra, también nos encontramos con expresiones en las que el sustantivo aparece solo en plural, como en locuciones nominales (fondos mutuos, cuidados intensivos, frutos secos, artes marciales…), en locuciones verbales (atar cabos, cerrar filas, ajustar cuentas, irse por las ramas…), y en locuciones adverbiales (a borbotones, a carcajadas, a manos llenas, a gatas, a regañadientes).
Finalmente, no podemos dejar de mencionar algunos sustantivos propios de ciudades (Iquitos, Buenos Aires), de países (Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos), de cordilleras (Pirineos, Urales), de archipiélagos (Canarias, Galápagos), entre otros.
Nos dicen que “Pluralia tántum es la forma castellanizada para referirse a aquellos sustantivos que se construyen solo en plural: víveres, exequias, añicos, nupcias, represalias…
En la Biblia se lee que algo así dijo el Señor: “Si te dan un golpe en la mejilla, pon la otra”. Lo que no se sabe es si dijo qué hacer después, en represalia, De los otros sustantivos no encuentro algo equivalente.
Buen contenido. Gracias, doctora.
Buen artículo, doctora.
Gracias.