¿Seísmo?
Por Karent Urízar González, publicado el 27 de junio de 2012En estos últimos días llegan trágicas noticias sobre catástrofes naturales que han sembrado la muerte y el sufrimiento por diversos lugares de la Tierra, sobre todo noticias acerca de movimientos terrestres como terremotos, sismos y seísmos.
En realidad, estas tres palabras son sinónimas y se aplican a los movimientos telúricos (del latín tellus/telluris, “tierra”) de las placas tectónicas en el interior del planeta. “Sismo” y “seísmo” provienen del griego seismós (conmoción, agitación, sacudida), mientras que el término “terremoto”, que es el más utilizado aquí, viene del latín terraemotus (de terrae, o sea ‘tierra’, y motus, ‘movimiento’).
Hasta la primera mitad del siglo pasado, se utilizaba “terremoto” como denominación de los temblores de tierra, pero después de que en Francia se inventara el sismógrafo en 1880, entraron en uso “sismo” y “seísmo”, palabras que no llegaron directamente desde el griego, sino por intermedio del francés “seisme”.
No podemos olvidar la expresión sinónima “temblor de tierra”, registrada en todos los diccionarios del castellano, heredada del latín tremor terrae, aunque ahora se utiliza comúnmente “temblor” para aquel movimiento de menor magnitud que no causa daños.
Asimismo, todo movimiento telúrico se genera en un “hipocentro”, que es el punto o foco donde se origina un terremoto o una explosión bajo tierra. Por su parte, el “epicentro” es el punto en la superficie de la tierra que está directamente encima del hipocentro. El epicentro es usualmente el escenario de los mayores daños, y por eso es el término más conocido: deriva del griego epikentron, de epi (sobre, en) y kentron (centro).
Otro término que escuchamos en este campo semántico es el que mide la intensidad del sismo en “escalas”, la “Escala de Richter” y, la de los especialistas, la escala de Mercalli.
La más difundida es la primera, llamada así en honor a Charles Richter, sismólogo estadounidense, quien calculó que la magnitud de un terremoto o sismo podía ser medida conociendo el tiempo transcurrido entre la aparición de las ondas y la amplitud de éstas. La clasificación de la escala de Richter va desde el grado -1.5 hasta el grado 12.
Pero cuál fue la magnitud real del último cataclismo de Haití: esta república sufrió un “terremoto” de 7.4 grados en la escala de Richter, cuyo epicentro fue ubicado a 15 kilómetros al suroeste de Puerto Príncipe, la capital del país. Después se registraron tres réplicas (repeticiones) de 5.9, 5.5 y 5.1 grados. Para hacernos una idea, hay que tener en cuenta que hasta el grado 4 se consideran “temblores”. Un punto más a partir de este grado y hasta el 5 ya todos sentimos el “sismo”, aunque no es frecuente que produzca daños significantes. Cuando entramos en el grado 5, el sismo se considera moderado y suele causar destrozos en edificios mal construidos o algún daño aislado en las grandes edificaciones. El grado 6 ya se considera fuerte y supone una catástrofe para la zona, pudiendo quedar destruidas áreas de 160 kilómetros de diámetro. Por esta información y por todas las imágenes que se han difundido, podemos entender la magnitud de los 7.4 grados sufridos en Haití y recordar los 7.9 de Pisco.
Los grados superiores no han sido presenciados, gracias a Dios, más que en el cine. El grado 12 significaría la destrucción total de la Tierra, al fracturarse por su mismo centro.
Para concluir, basta saber que el uso de sismo y seísmo es equivalente. “Sismo” es más utilizado en Hispanoamérica, mientras que en España se prefiere “seísmo”. En resumen, ambas palabras se refieren a lo que todos tememos: un terremoto.
Creo que su artículo tiene algunas imprecisiones en lo que se refiere a las escalas. En primer lugar existen dos maneras de medir un terremoto, una de ellas es la magnitud que está relacionada con la energía liberada por el evento sísmico; esta medida se realiza con los instrumentos de detección colocados en la superficie es decir los sismómetros. Diversas escalas son utilizadas para dar esta información, la que se menciona más a través de los medios es la escala de Richter pero la más utilizada es la magnitud de momento denotada por Mw. Así por ejemplo el reciente terremoto de Ecuador tuvo una magnitud de 7.8 Mw y no debería utilizarse la palabra grados al menos los sismólogos no lo hacen. La otra forma de informar acerca del sismo es indicando su intensidad que es una medida de los daños producidos, así en teoría estos ocurrirían en el epicentro (aunque no siempre) . En este caso la escalas utilizadas son Mercalli (Mercalli Modificada, Escala Macrosísmica Europea, etc) que varía en I y XII (en números romanos). En el caso del sismo la intensidad fue de VIII. Bueno sólo quería aclarar algunos puntos que quizá por no ser uds del área son desconocidos, gracias por el excelente trabajo de divulgación que realizan, disculpen lo extenso, saludos.
Falto mencionar el terremoto más fuerte registrado en la historia de la humanidad, el de chile en Valdivia, duro 10 minutos y su registro fue de un terremoto, si es que no fue cataclismo, superior a los 9.0 Mw
…y cuándo fue eso, en qué año?