• Robert Moniot, vicepresidente de Clover Foundation y presidente del Consejo Directivo del Premio Esteban Campodónico.
• Antonio Mabres, presidente del Consejo Consultivo y Jurado del Premio Campodónico.
• Dignas autoridades.
• Paola Friedrich, representante de St. Jude Children’s Research Hospital, institución proponente del premiado 2022
• Jesús Dongo, fundador y presidente de Asociación Vidawasi Perú, galardonada en el área Servicios Directos a la Sociedad, con el Premio Esteban Campodónico 2022
• Distinguidos miembros del jurado, señores y señoras

Muy buenas tardes

En esta ocasión, cumplo la labor de representar al rector de la Universidad de Piura, que, por motivos de fuerza mayor, no puede estar presente en esta ceremonia como le hubiese gustado; sin embargo, lo hace remotamente.

Agradezco a quienes nos acompañan de manera virtual, de manera especial a los miembros del Consejo Consultivo y a los ganadores de anteriores ediciones del premio.

Sean ustedes bienvenidos a la ceremonia de entrega del Premio Esteban Campodónico 2022 en el área Servicios Directos a la Sociedad.

Nos reunimos en esta ocasión en las instalaciones de la Asociación VIDAWASI, ganadora del Premio Campodónico 2022, atendiendo a su gentil invitación, que agradezco muy de veras en nombre de la Universidad de Piura y de quienes aquí estamos. En el impresionante marco natural de este maravilloso valle del Urubamba, destaca la trascendencia de la labor que realizan quienes conforman esta noble tarea. Es, sin lugar a dudas, un entorno que destaca y realza esta Ceremonia.

Estar aquí nos brinda la oportunidad de ser testigos de la maravillosa obra que Vidawasi ha podido poner en marcha en medio del Valle Sagrado, valle que no solo se caracteriza por su belleza paisajística, sino que evidencia la historia y cultura de los Andes peruanos. El entorno natural que rodea esta ciudadela y el afectuoso trato de todo el personal de Vidawasi hacia los niños y sus familias, junto con la calidad profesional de los médicos, son la combinación perfecta para que todos los que aquí son atendidos logren un estado de bienestar y consigan la recuperación que tanto ansían.

Los ganadores de la XVIII edición del Premio Esteban Campodónico, Vidawasi Perú, son ejemplo vivo de entrega y servicio. Hace 9 años iniciaron la loable misión de descentralizar la pediatría especializada y lucha contra el cáncer infantil desde esta ciudadela de salud y en la actualidad siguen trabajando día a día por ser una comunidad líder en salud infantil.

A través de su misión “Generar vida, ofrecer una oportunidad que una al mundo para el cuidado de la salud infantil bajo los pilares de amor, ciencia y dignidad para los niños y sus familias”, Vidawasi representa la esencia del premio: vocación de servicio hacia los demás. La Universidad de Piura cumple con agrado la tarea de reconocer con el Premio Campodónico trascendentes iniciativas como esta. Este premio, concebido por la generosidad y visión de futuro del Dr. Esteban Campodónico Figallo, médico y humanista destacado de su época, responde al profundo amor al Perú de su creador, quien dejó un legado para estimular el progreso científico y fomentar los auxilios humanitarios en el país.

Felicitamos a la Asociación Vidawasi Perú, ganadores de la presente edición. Estamos seguros que este premio contribuirá positivamente a estimular la labor de Vidawasi Perú, y les permitirá seguir haciendo tanto bien a miles de niños peruanos provenientes de las zonas más vulnerables del país. Como diría el Papa Francisco: “Cuando los niños son aceptados, amados, cuidados y protegidos, la familia está sana, la sociedad es más sana y el mundo es más humano”.

Agradezco su presencia física o virtual y les doy la más cordial bienvenida a la vigésimo octava edición del Premio Esteban Campodónico.

Muchas gracias.

Muy buenas tardes a todos.

Para mí es un honor estar aquí con todos ustedes para celebrar la otorgación del Premio Esteban Campodónico a VIDAWASI, una organización pionera que busca ser una comunidad líder en salud infantil en beneficio de las poblaciones más vulnerables.

Yo soy Paola Friedrich, soy Oncóloga Pediatra en el Hospital St. Jude Children’s Research Hospital ubicado en Memphis Tennessee Estados Unidos.

Soy directora de programas en la región de América Latina y directora de un programa de investigación dedicado a entender y encontrar soluciones para resolver las desigualdades mundiales en el cáncer infantil.

Mi hospital fue fundado en el 1962 por Danny Thomas, un visionario que hizo una promesa a San Judas Tadeo, santo de las causas perdidas, en búsqueda de que “ningún niño tenga que fallecer en el amanecer de su vida”. Esta frase ha trascendido en tiempo y espacio, y describe la esencia y el espíritu de la institución y todos los que allí trabajamos. Con este mensaje hemos llegado a establecer lazos con muchas instituciones a nivel global. La Alianza Global de St Jude hoy une a más de 180 hospitales de todo el mundo, 70 de los cuales están en Latinoamérica.

Proyectos como VIDAWASI pueden inicialmente considerarse “imposibles”. Sin embargo, así empezó St Jude, con un sueño “imposible”. Poco a poco, edificio por edificio, área clínica por área clínica, recurso humano por recurso humano, voluntario a voluntario, se va creando una institución única y de impacto local y global. Nosotros en St Jude tenemos impacto localmente en el área geográfica que nos toca atender y tenemos impacto a nivel nacional e internacional mediante el referido de pacientes en recaída y mediante la difusión de la investigación tanto clínica como de laboratorio que hacemos. Apoyamos la capacitación y desarrollo profesional de nuestro personal y de la comunidad de oncología pediátrica en general. Es así qué instituciones como lo es hoy día VIDAWASI pueden tener un impacto transformador en el bienestar social y de salud de la población infantil tanto localmente aquí en el Valle de Sagrado y la Ciudadela de Salud Infantil, en todo en Perú, en toda Latinoamérica, y en todo el mundo. La experiencia y conocimiento que aquí se genera es valiosa para otros hospitales y países.

Hoy con mucho honor y cariño participo de la entrega de este premio y reitero mi compromiso con la alianza entre St. Jude y VIDAWASI, una alianza que mi colega y amiga Monika Metzger inicio hace muchos años.

Culmino estas palabras agradeciendo a Marina, Jesus, y todo el equipo de VIDAWASI desde cuatro perspectivas

1. Como Directora para Latinoamérica de St. Jude Global, les agradezco por la oportunidad de recorrer este camino con ustedes
2. Como médico, les agradezco por combinar la aspiración de excelencia y tecnología, con la aspiración de manejo humano e integral
3. Como mamá, les agradezco por el valor que ponen en la salud de todos los niños y particularmente, los niños más vulnerables
4. Finalmente, como sobreviviente de cáncer infantil, les agradezco por sumase a esta lucha y valorar la vida de cada niño con cáncer

Transcripción del Discurso del Sr. Jesús Dongo:

Muy buenas tardes queridos hermanos aquí presentes, aliados de honor, a todos nuestros vinculados que nos siguen a través del link.

Permítanme compartir con ustedes como un hermano, un hermano más que tiene la dicha al igual que ustedes de formar parte de esta iniciativa.

Por nuestros cimientos de fe reconocemos a esta obra que nace, a esta semillita que invita a ser germinada por el amor y los talentos del mundo. Los invitamos a todos a experimentar la alegría de lo que está aconteciendo, hemos vivido un día de intensidad, hemos vivido horas, encuentros, que nos permiten reconocerlos, experimentar esa alegría de ser parte de una obra que se entrega al mundo.

Sin duda, semillas que fueron sembradas con anterioridad, como la que sembró Danny Thomas, con ese legado y esa inspiración que dejó al mundo St. Jude Research Hospital de los Estados Unidos y otros grandes hermanos, grandes aliados internacionales y nacionales fueron la inspiración decidida para que surja algo desde aquí, desde nuestro amado Perú. Con los cimientos de fe de Vidawasi reconocemos a la creación como una sola, las fronteras las pusimos los hombres y desde aquí en representación de todas las generaciones que vendrán, que pasarán, que se verán aliviadas y reconfortadas con el amor puesto sobre Vidawasi por todos ustedes y por las generaciones que seguirán llegando para hacer de esta obra una plataforma de amor y bienestar para la humanidad. Quiero decirles que este hermano solo representa a todas esas vidas, a todas esas almas. Reitero que encontrarán consuelo en Vidawasi y a un número mayor de personas que podremos completarnos, podremos expresar gratitud, realización plena como seres humanos sirviendo de instrumento para generar bondad y bienestar a nuestro país y al mundo.

Esos niños que nos unen hoy, aquí todos representados como seres humanos, encontramos deleite, encontramos satisfacción plena, uniéndonos por ellos. Probablemente ellos son los héroes que a tan temprana edad nos permiten reconocer el llamado y unirnos para hacer algo extraordinario tal cual como lo reiteramos en Vidawasi. En esta satisfacción de estar presenciando que Vidawasi dejó de ser una promesa, dejó de ser una imitación, dejó de ser buenas intenciones y planos expuestos para unir al mundo.

Hoy ya es una realidad, hoy Vidawasi nos congrega y congrega a muchas personas, uniendo ese anhelo tan grande en la condición de seres humanos uniéndonos para lograr la dicha de toda alma sobre la tierra: trascender, trascender bajo el concepto de vivir después de la muerte, vivir como parte de ese aporte entregado en nuestros contados días sobre la tierra, vivir la vida de cada uno, de todas esas generaciones, de todos esos niños que seguirán viviendo en nuestro nombre; inspirar a la sociedad para experimentar la dicha, reitero, de ser seres humanos unidos con el orgullo de ser creyentes y para los que no profesan la fe, con el orgullo de ser seres humanos integrados y experimentando la dicha de hacer el bien.

Les agradezco de todo corazón por integrarse a esta familia, por ser parte de esta historia. Al Premio Esteban Campodónico, nuestro mayor y profundo agradecimiento por esta inspiración, por este aporte, por este legado que seguirá inspirando año tras año a diferentes personas y organizaciones para impulsar esa responsabilidad de hacer algo grande por el Perú.

Gracias queridos hermanos, ustedes serán siempre una inspiración para el país y estoy seguro que Don Esteban Campodónico experimenta la misma felicidad desde el lugar preciado donde todos sabemos que tiene que estar un hombre de inspiración.

Muchísimas gracias a ustedes como aliados, como hermanos y una vez más con mucha emoción les digo que en nombre de todas las generaciones, de todas las vidas que se salvarán con esta convocatoria que hace Vidawasi al mundo, les decimos gracias, gracias Perú, gracias queridos hermanos aliados, organizaciones que creyeron en nosotros y que hoy son parte de esta dicha y de este recuento de voluntades y acciones que inspiran al mundo.

Gocen, experimenten su Vidawasi, disfruten, no sabemos cuánto tiempo más podemos estar aquí sobre la tierra, pero podemos llevarnos la dicha de ser parte de la historia para un legado de la humanidad.

Gracias a todos, gracias de todo corazón en el nombre de los niños del Perú.

Muchísimas gracias.

Estimados invitados, Doctores José Ricardo Stok y Antonio Mabres, miembros del Consejo Directivo y Consultivo del Premio Esteban Campodónico, señores del Jurado, señor Jesús Dongo, fundador y presidente del directorio de la Asociación Vidawasi Perú, miembros del equipo de Vidawasi, doctora Paola Friedrich, representante de St. Jude Children’s Research Hospital, señoras y señores que asisten presencial o virtualmente a esta ceremonia, muy buenas tardes.

Nos encontramos en la parte final de la ceremonia de entrega del Premio Esteban Campodónico por servicios a la sociedad peruana, edición 2022.  A lo largo de los 28 años desde su primera entrega, el fondo del Premio Esteban Campodónico ha honrado y apoyado a 31 personas y 18 (ahora 19) instituciones, por su actividad profesional destacada o sus servicios directos a la sociedad peruana y a la humanidad.  Hoy recordamos y aplaudimos a cada uno de nuestros premiados por su trabajo bien hecho y entrega para hacer del Perú un país mejor.

Este año la ganadora es la Asociación Vidawasi Perú, una ciudadela hospitalaria, que hoy nos acoge, concebida como un espacio de amor y esperanza para el cuidado de la salud pediátrica y la lucha contra el cáncer infantil.  Proporciona servicios descentralizados, siguiendo la indicación del Papa Francisco de ir a la periferia.  Ubicado aquí en Urubamba, en medio del Valle Sagrado de los Incas, sirve a muchos niños con cáncer u otras enfermedades y a sus familias que requieren no solo apoyo médico sino también emocional.  Es muy adecuado que reciba este premio nombrado por don Esteban Campodónico, porque él también ejerció su vocación de servicio para atender incluso gratuitamente a las personas más necesitadas. Incluso aprendió quechua para poder hablar directamente con los pacientes procedentes de otras regiones.  Hoy honramos la Asociación Vidawasi por su gran servicio a la sociedad peruana y a la humanidad.  Sin embargo, más importante que el honor que el Premio Esteban Campodónico da a Vidawasi, es el honor que esta asociación ha dado al Perú, con su ejemplo de servicio a los más necesitados.

No podemos dejar de recordar en esta ceremonia a quienes partieron de este mundo, de modo especial al Dr. Alberto Cazorla Talleri, Premio Esteban Campodónico 2012, fundador de la cátedra de Bioquímica en la naciente Universidad Peruana Cayetano Heredia, quien partió el pasado marzo.

Después de recibir el galardón, los ganadores del Premio Esteban Campodónico continúan promoviendo sus actividades y progresando en sus carreras profesionales.  Por mencionar uno, los jóvenes músicos de la Orquesta Juvenil – Sinfonía por el Perú, ganadora en el 2014, emprenderán este agosto un tour a festivales en Salzburgo, Austria, y en Gstaad y Lucerna, Suiza. Además, algunos de nuestros premiados brindan su tiempo y dedicación acompañándonos como parte del jurado en los últimos años: Liliana Mayo, fundadora del Centro Ann Sullivan del Perú, ganadora en 1996; Selma Passalacqua en representación del Voluntariado del Hospital Larco Herrera, asociación premiada en el 2005; y Carla Cavassa, fundadora de Aprendo Contigo, institución ganadora en 2009. Gracias a todos ellos por su labor.

Como representante de Clover Foundation, que colabora con la Universidad de Piura en la administración de este programa de premiación, felicito nuevamente al señor Jesús Dongo y sus colaboradores en Vidawasi. Confío que el premio reconoce sus esfuerzos en servicio a la sociedad y es un aliciente para el trabajo bien hecho. Agradezco también a todas las personas que han ayudado para hacer exitoso este premio, no obstante las dificultades de la pandemia.  Declaro cerrada la edición 2022 del Premio Esteban Campodónico, y abro la edición 2023.