Por Carola Tueros
Por Julio Talledo. 15 agosto, 2011.Hace un año, en esta columna, escribí el artículo “Solo la Virgen fue elevada en cuerpo y alma al Cielo. ¡Aquella es María!”. Como en aquel escrito, en el de ahora no explicitaré este importante dogma católico de la Asunción de Nuestra Señora celebrado todos los 15 de agosto; sino que los actualizaré en aspectos ortográficos de palabras utilizadas en ambos encabezados, me refiero a “solo” (adjetivo o adverbio) y a “los demostrativos” (pronombres o determinantes: este/a/o, ese/a/o, aquel/ella/ello, estos/as, esos/as, aquellos/as).
En el título, el adverbio “solo” y el pronombre “aquella” aparecen sin tildar porque la Academia en su nuevo manual de Ortografía, publicado en diciembre de 2010, norma que se prescinda de la tilde en estas palabras, inclusive así existiese ambigüedad. En agosto del año pasado informábamos que ya no se tildaban, pero sí cuando surgía una doble interpretación, ejemplos: “Hice un ejercicio sólo”, aquí tildábamos “sólo” para indicar adverbio (sólo: solamente) y no adjetivo (solo: solito)”; “Veo a aquélla empresaria”, aquí tildaba “aquélla” para indicar pronombre (aquélla: ella puede ser empresaria) y no determinante (aquella: miro a la empresaria).
No obstante, actualmente, la recomendación es nunca tildar estas palabras sin excepción alguna. La RAE acota que las ambigüedades pueden aclararse por el contexto comunicativo o evitarse por otros medios como el empleo de sinónimos (reemplazando “solamente” o “únicamente” por “solo”; “aquella” por “ella”, “aquel” por “él”, etc.), la puntuación adecuada (…Pero a aquella, nuestra Madre, la recordamos … / Veo a aquella, empresaria), la inclusión de elementos o la alteración en el orden de las palabras para una sola elucidación (Hice un ejercicio sin que nadie me ayudara/ Aquella podría ser empresaria), etcétera.
Asimismo, es injustificado utilizar la tilde diacrítica (acento gráfico que distingue palabras con idéntica forma, pero diferente categoría gramatical: té/te, tú/tu, etc.) porque no cumplen el requisito de oponer palabras tónicas o acentuadas a palabras átonas o inacentuadas formalmente idénticas, ya que tanto “solo” (adverbio o adjetivo) como los “demostrativos” (pronombres o determinantes) son palabras tónicas en cualquiera de sus funciones.
Actualizado el tema me queda aclararles que “solamente” mañana es la Asunción de nuestra Madre. No obstante, quienes la amamos, no “solo” la festejamos el 15; sino “este” y todos “aquellos” días de nuestro noble existir. ¡Viva nuestra Reina del Cielo! ¡“Aquella” es, por siempre, María!
Facultad de Humanidades.
Artículo publicado en el diario Correo, edición Piura, 14 de agosto de 2011.