(Piura).- Para el Dr. Carlos Hakansson, decano de la Facultad de Derecho, el actual panorama nacional evidencia que el Gobierno no cuenta con cuadros políticos capacitados para resolver un conflicto social.
Por Julio Talledo. 16 julio, 2012.
(Piura).- Pese a los esfuerzos del Gobierno de turno por fomentar el diálogo con los opositores al Proyecto Minero Conga y aunque aún rige el Estado de emergencia en tres provincias de la región, las protestas en Cajamarca continúan. Para el Dr. Carlos Hakansson, decano y docente de la Facultad de Derecho de la Universidad de Piura, este panorama evidencia que el Gobierno de Humala Tasso no cuenta con cuadros políticos capacitados para resolver un conflicto social como el de Conga.
Hakansson Nieto recalcó que, en la actualidad, el Estado carece de institucionalidad política lo que no le permite atender con eficiencia todos los problemas que acontecen en el país. Indicó que mientras los estados del mundo “son muy grandes para resolver problemas locales y muy pequeños para resolver problemas globales, en el Perú ni siquiera hay Estado. El Gobierno no llega más allá de 600 metros sobre el nivel del mar. Eso es lo que está pasando”.
Los mediadores en el conflicto Conga
Al referirse a la elección del ex sacerdote Gastón Garatea y del obispo de Trujillo, Miguel Cabrejos, como intermediarios entre el Gobierno y los opositores al proyecto Conga, el jurista indicó que los nuevos mediadores deben presentar propuestas sólidas respaldadas por datos relevantes obtenidos de su observación y análisis del conflicto. Ello, dijo, con la finalidad de que el Gobierno esté dispuesto a ceder y buscar todos los medios posibles para la realización de dichas propuestas. Sin embargo, aclaró que estas recomendaciones no son vinculantes.
En caso contrario, afirma el constitucionalista, el planteamiento de propuestas vagas y con poco fundamento de parte de los intermediarios contribuiría a que el Gobierno haga caso omiso de su intervención y que se genere la desconfianza de los ciudadanos hacia la gestión gubernamental.
"El conflicto en Cajamarca invita a revisar las normas de la descentralización", afirma Hakansson. Foto: lamula.pe
Más representación política
Por otro lado, el docente de la Universidad de Piura destacó el silencio de los congresistas cajamarquinos así como la necesidad de establecer asambleas regionales en todo el país con la finalidad de que el partido político que sea elegido para asumir la presidencia de una determinada región pueda tener un sector de oposición.
No obstante, Hakansson Nieto expresó que la formación de las asambleas generales solo será posible si se dejan de lado los intereses particulares y se piensa en el porvenir de la Región y del país: “los vientos de los intereses de la Nación no corren en Cajamarca”, expresó el experto.
Mejora de la descentralización
Para el Dr. Hakansson, el desarrollo del conflicto minero en Cajamarca es un indicador de la necesidad que existe de revisar las normas de descentralización aplicadas por el Gobierno, con la finalidad de establecer, en climas de conflicto social, cuáles son las competencias propias del Gobierno central, las que competen a los gobiernos regionales y cuáles deben ser compartidas.
Por otro parte, enfatizó que es necesario el cultivo de la comunicación para el desarrollo, de parte del Estado. Para ello, sostiene el especialista, debe promoverse un trabajo conjunto, en pro del desarrollo de la región y del país, en el que intervengan los pobladores, el gobierno regional, el gobierno central y los inversionistas extranjeros.
Del mismo modo, Hakansson sostuvo que si el Gobierno soluciona de manera adecuada la problemática social suscitada en Cajamarca, se podrá establecer como programa piloto que podrá ser aplicado en otras zonas del país, si se diera un acontecimiento similar.
