La sílaba y su función en la lengua española

Por Claudia Mezones. 06 noviembre, 2012.

La sílaba es una unidad de la pronunciación. Según sea la lengua, adopta unas características particulares, por ejemplo, en español todas tienen como núcleo a las vocales, mientras que como márgenes silábicos a las consonantes (Piu.ra, a.jí, pru.den.te). Como tal, nos sirve para marcar la correcta pronunciación de las palabras (unidad silábica fónica), pero también es de gran ayuda para separar correctamente la estructura de las palabras en la escritura, al final de renglón (unidad silábica morfológica).

La presencia de prefijos determina la separación morfológica. Así pues, en la palabra “subrayar” tenemos que identificar el prefijo sub- (‘bajo o debajo de’), que se mantiene en la descomposición silábica escrita. De allí que, por regla general de división silábica, solo sea posible “sub.ra.yar” y no *su.bra.yar. Sucede así porque el prefijo es transparente o fácilmente identificable, como también pasa en palabras como sublunar, subregional, submarino, subíndice, subcategoría, que se pronuncian del mismo modo con delimitación silábica morfológica: sub.lu.nar, sub.re.gio.nal, sub.ma.ri.no, sub.ín.di.ce, sub.ca.te.go.rí.a, a pesar de que en el habla se tienda a relajar la pronunciación y pareciera que se une la “b” al sonido siguiente.

Ahora bien, en el habla pueden darse dos situaciones posibles: 1) que se respete la separación morfológica, evidente en casos de prefijos transparentes (sub.ra.yar) o 2) que no se respete, cuando la pronunciación no es difícil y el prefijo ya no es transparente (su.bor.di.nar, su.ble.var, ), donde, coinciden, por tanto, separación silábica morfológica y fónica.

Se puede dar el caso, como en “subrayar”, que la pronunciación tienda a unir las consonantes marginales (/b/ /r/) de las sílabas contiguas (sub. ra), sobre todo porque la b del margen posnuclear (de: sub) se relaja en la pronunciación y los hablantes tienden a unirla a la r prenuclear (de: ra) para formar un margen prenuclear más fuerte (bra).

Lo mismo pasaría con la “b” de “suboficial”, que al estar en un margen posnuclear morfológico y entre dos vocales (sub.o) tiende a relajarse en la pronunciación, así pierde fuerza oclusiva, por lo que, incluso, puede llegar a darse el caso extremo de pronunciación relajada en “suoficial”, con desaparición o pronunciación casi imperceptible de la “b”, lo que es una consecuencia fónica más factible que una pronunciación como “su.bo.fi.cial”.