Reconocidos arquitectos y urbanistas dieron inicio a las I Jornadas Internacionales sobre Urbanismo y Planificación Territorial, organizadas por el lanzamiento del programa académico de Arquitectura de la Universidad de Piura.
Por Javier Távara Farfán. 30 septiembre, 2013.¿Vivimos una época de cambios o un cambio e época? Para Rubén Pesci, director de la cátedra Unesco/FLACAM para el desarrollo sustentable, se vive actualmente un cambio de época, que implica: “pasar del objeto arquitectónico al paisaje urbano, al espacio de relaciones humanas, donde temas como el clima, la temperatura, la acústica, la sensibilidad y la calidad de experiencia son mucho más importantes que los materiales”.
Pesci, junto a los expertos arquitectos y urbanistas José María Ezquiaga y Carlos Alberto Fernández-Dávila estuvieron en la UDEP, por el inicio de las I Jornadas Internacionales sobre Urbanismo y Planificación Territorial, organizadas por el lanzamiento del programa académico de Arquitectura de la Universidad de Piura. Los invitados disertaron sobre la formación del arquitecto ante los retos de la metrópolis actual, ante un auditorio integrado por académicos, ingenieros, arquitectos y otros profesionales de la ciudad de Piura.
Los retos de los arquitectos
Durante su participación Fernández-Dávila, miembro fundador de URVIA – Corporación Andina de Urbanistas, indicó que el Perú posee un territorio complicado, con muchos microclimas, zonas vulnerables, diversidades sociales y problemas administrativos inimaginables. Sostiene, por ejemplo, que regular el tráfico no solo es cuestión de decir ‘por esta vía deben o no deben pasar los microbuses’. El país, dijo, es complejo social, cultural, administrativa y políticamente, “porque nos hemos especializado en enredar las cosas. Los arquitectos tenemos que navegar en medio de toda esta tormenta perfecta que hemos creado”.
Recomendó que los estudiantes de Arquitectura no solo sean formados para que sepan componer espacios o sean competentes en el manejo de materiales, “sino para que deben tener una paciencia infinita para navegar en un mar lleno de turbulencias”. Otro de los desafíos que planteó Fernández-Dávila es trabajar en la planificación de los problemas; y, además, tener creatividad ante “las limitaciones presupuestales son un reto, porque el Perú está diseñado para la pobreza, y, lamentablemente, aún no se ha planeado para el boom que se vive ahora. Los cambios que tenemos que hacer son muy profundos y si nuestros alumnos no entienden esa compleja realidad, por más que les hayamos enseñado a formar maravillosos espacios y manejos muy interesantes de materiales, sin coordinaciones con los demás especialistas, no creo que les sea fácil la tarea de construir el mundo.”
El contexto antes que la pieza
Por su parte, el argentino Rubén Pesci, expresó que los jóvenes arquitectos deben aprender a proyectar primero el contexto antes que la pieza de arquitectura. “Esta es la tarea del nuevo arquitecto, que yo llamo ambitecto: diseñar un lugar inteligente y fascinante para vivir. La capacidad de construir inspirada en el ambiente y no en las revistas de algún país”.
Para él, la esperanza de Latinoamérica está en los arenales, en las villas difíciles que rodean las ciudades y en los contrastes de riquezas. “El arquitecto tendrá un protagonismo central, si se prepara para mejorar las relaciones humanas y no solo para organizar materiales en los espacios”.
Complementando, José María Ezquiaga, Premio europeo de planificación urbana y regional 2013, señaló que la clave de la Arquitectura está en abrirse a la innovación, olvidar los caminos más trillados y conjuntamente con los estudiantes vivir la experiencia de innovar. “La arquitectura es un gran oficio y, por tanto, es un aprendizaje colectivo entre profesores y alumnos”.
El experto español dijo que existe el desafío de acercarse a la ciudadanía. “No hay que perder la dimensión urbana de la arquitectura, solo desde este punto se alcanzará la excelencia y la satisfacción de saber que como personas y profesionales estamos dando un servicio útil a la comunidad”.
Innovación y arquitectura
Ezquiaga indicó también que siempre se deben plantear soluciones al alcance de las sociedades. Como ejemplo, se refirió al tremendo auge de la construcción habido en España; sin embargo, dijo hubo muy poca innovación tecnológica, de los sistemas constructivos y de los costos. Por eso, “la arquitectura española es excelente en el ámbito de sus profesionales, pero, en cambio, no alcanza el mismo nivel notable en lo tecnológico”.
La innovación y la arquitectura no pueden separarse del desarrollo sostenible anota el experto: “de nada serviría tener una casa energéticamente sustentable porque si es muy costosa (económicamente) la población no podrá acceder a ella”. Por ello, recomendó ampliar la base social para que la arquitectura de calidad llegue a los segmentos sociales menos beneficiados. “hay que formar arquitectos que entiendan que el desafío está en dar una solución buena a un problema complicado”.
Arquitectura y relaciones humanas
La tecnología por muy grande y maravillosa que sea, si no fortalece una identidad y un criterio de cosmovisión, puede ser solo un juego de vanidades, expresó Pesci. Sostuvo que esta debe ser un medio para mejorar la vida y las relaciones humanas.
“Actualmente hay un mundo que empieza a privilegiar la accesibilidad sobre la identidad y la cantidad sobre la calidad. Hay que pensar seriamente en qué medida ese crecimiento puede ser compatible con una sociedad para la que ‘comprar’ es su principal meta. Estamos a tiempo de tomar lo bueno de un impulso económico y tecnológico para ser una sociedad más justa”.
Fernández-Dávila, agrega que el sentido común obliga a ver las cosas con prioridades y, en ese aspecto, el Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP) exige ser tremendamente racional con las decisiones. “Cuando vemos algunos resultados que no han seguido el SNIP, nos damos cuenta de la falla. El SNIP es terrible, pero nos obliga a ser racionales y a no importar soluciones sin antes meditarlas. Creo que uno no debe ser prejuicioso ante la realidad”.
Nueva carrera
A partir del próximo proceso de admisión 2014-I, la Universidad de Piura incluirá en su oferta académica la carrera de Arquitectura, con ello busca formar profesionales con una sólida educación científica y humanística. Esta nueva carrera, de cinco años de duración, ha sido diseñada para dotar a los estudiantes de las bases teóricas, técnicas y éticas que les permitan encontrar las respuestas más apropiadas a los diferentes requerimientos de la realidad.
El Arq. Ernesto Mavila, miembro del directorio del programa académico de Arquitectura, señala que esta nueva opción académica pretende responder a las necesidades y demandas sociales y, sobre todo, influir positivamente en la comunidad piurana para contribuir con su desarrollo urbano. “Se piensa sobre todo formar arquitectos para la ciudad, teniendo en cuenta que tanto la arquitectura como el urbanismo son el objeto propio de una misma formación y de un mismo profesional, que debe atender estas exigencias del espacio para la vida”.
Esta carrera contará con un excepcional cuerpo de profesores, integrado por destacados profesionales del Perú y del extranjero, y con aulas recientemente remodeladas para el mejor aprovechamiento de los alumnos. Las inscripciones para el Test de Aptitud Académica del 04 de enero de 2014, serán del 18 de noviembre al 17 de diciembre de 2013. Informes: www.udep.edu.pe