La Universidad es un centro generador del saber humano y su esencia trata de superar esos límites autoimpuestos de la razón humana para buscar la verdad, estas fueron las principales ideas vertidas en el seminario “La Universidad. Su razón de ser”.
Por Dirección de Comunicación. 21 julio, 2014.La Universidad es un centro generador del saber humano. Su razón de ser está en el desarrollo y trasmisión de la ciencia y la cultura, al más alto nivel. Además, su esencia trata de superar esos límites autoimpuestos de la razón humana para buscar la verdad, estas fueron las principales ideas vertidas en el seminario “La Universidad. Su razón de ser” impartido en la UDEP.
El seminario fue desarrollado en los campus de Piura y Lima en el marco del Programa de Formación Permanente de Profesores que lleva a cabo la Universidad de Piura. El Dr. Víctor Morales Corrales, exrector de esta casa de estudios expuso la visión histórica e identidad de la Universidad como institución, y su autonomía y finalidades. Por su parte, el Dr. Enrique Banús Irusta, director del Instituto de Estudios Europeos y profesor de la Facultad de Humanidades, desarrolló la ponencia “La verdad de la libertad: la Universidad en la visión de Juan Pablo II y Benedicto XVI”.
La esencia de la Universidad
Morales Corrales explicó las diversas leyes que se han ido dando en torno a las universidades en el Perú y la confusión que existe entre la definición actual y real de esta milenaria institución. Aseveró que la Universidad no es un centro productor de conocimiento, sino un generador del saber humano e indicó que su razón de ser está en el desarrollo y trasmisión de la ciencia y la cultura, al más alto nivel.
Asimismo, en una entrevista, al referirse a la autonomía de la universidad, el doctor Morales expresó que esta no es una fábrica de profesionales, sino que forma intelectuales. Además: “La Universidad no es una dependencia del estado, ni un apoyo a la empresa, ni una escuela de educación superior sin más, ni – muchos menos- un comercio movido por el lucro”.
Al abordar la visión histórica de las universidades, Morales detalló que la ley promulgada hace 18 años sobre la promoción de la inversión en educación (artículo 2) originó una confusión de objetivos a los que debe estar llamada una Universidad. En ese sentido, afirmó que el saber al que debe apuntar la universidad ahora se enfrenta al objetivo de lucrar. En cuanto a la autonomía universitaria, contenida en el 5to artículo de la norma: “La persona natural o jurídica propietaria de una institución educativa particular (universidad) (…) establece, conduce, organiza, gestiona y administra su funcionamiento (…)”, el Dr. Morales opinó que esta ley entrega autonomía universitaria al propietario. “Se extiende cada vez más el fenómeno de ‘universidades comercio’ motivadas por el más puro afán de lucro. De ‘universidades subordinadas’ al mercado laboral inmediato para la programación de sus carreras”, explicó.
La verdad de la libertad
Por su parte, durante su intervención el doctor Enrique Banús refirió que las teorías posmodernas, como el relativismo cultural, aseguran que el hombre no puede conocer más allá de ciertos límites, como el de su cultura. En cambio, dijo, la esencia de la universidad trata de superar esos límites autoimpuestos de la razón humana para buscar la verdad.
Citando a Benedicto XVI, Banús apuntó que si bien la razón humana puede conocer la verdad, nunca llega a poseerla, pues la verdad misma siempre va a estar más allá de nuestro alcance. Indicó que estos supone un enfoque positivo que asume a la valentía como una actitud del universitario, quien apuesta por la grandeza de la razón con humildad.
“La humildad es una virtud indispensable en el ejercicio docente e intelectual. Muchas veces cuesta reconocer los errores, pero los profesores tenemos que pedir disculpas y rectificar, dar la cara ante los alumnos”, anotó.
Educar en libertad
Tal como lo detalló san Juan Pablo II, en su discurso en la Universidad de Padua en 1982, el profesor de la UDEP señaló que además de tener a la verdad como objeto de estudio, desde diferentes especialidades, la universidad tiene como finalidad la formación de generaciones jóvenes, en la que uno de los valores más importantes es la libertad.
“Estudiar antropología no es un capricho. Solo cuando se conoce quién es el hombre y cuál es su meta última, se puede guiar a cada uno a meta personal. Mediante la obra educativa el hombre se individualiza, se conocen las potencialidades de cada persona: todas diferentes, porque no formamos clones, ni los universitarios son un número”, comentó.
El Dr. Banús aseveró que la ‘relación creativa de la verdad’ que menciona Juan Pablo II, como la base de los estudios académicos, incluye un diálogo entre los miembros de la universidad, que tienen como objetivo de la educación hacer al hombre cada vez más maduro; madurez que lo lleva a una realización de todas sus posibilidades y aptitudes.
Links relacionados:
Video de la conferencia “La verdad de la libertad: la Universidad en la visión de Juan Pablo II y Benedicto XVI”, del Dr. Enrique Banús Irusta.
Entrevista con el Dr. Víctor Morales Corrales.