A partir de un caso, el cual combina aspectos de la realidad con la ficción, un jurado evaluará este sábado 11, los argumentos de los equipos participantes que cumplen el rol de demandante y demandado.
Por Tania Elías. 10 junio, 2016.
La simulación de juicio MOOT, que organiza la Revista Ita Ius Esto con apoyo de la Facultad de Derecho, enfrentará en la final a los equipos que fueron seleccionados en mayo, en las sedes de Piura y Lima, los que están conformados por los alumnos de tercer año, que cursan Argumentación Jurídica.
Fueron 31 equipos los que participaron en el concurso. En una primera etapa se evaluó los argumentos escritos y posteriormente, los 14 preseleccionados (8 de Piura y 6 de Lima) pasaron a la exposición oral, en sus respectivas sedes.
En esta final, el equipo ganador de Piura desempeñará el rol de demandado y el de Lima actuará como demandante. Los alumnos expondrán sus alegatos frente a un jurado, y harán uso del derecho a la réplica y dúplica respectiva, con la finalidad de defender sus posturas.
Por Piura participarán Pietro Pighi Bel, Manuel Guerra Guzmán, Mario Freddy Castro Núñez y Luis Alberto Merino Vise; por Lima debatirán Almendra Pachari, María Paula Castillo, Gabriela Rivera Ruiz, Teresa Lescano.
El caso que se ha propuesto plantea controversias en ámbitos como el Derecho Penal, Derecho Eclesiástico, Derecho de Familia. Un padre le exige a un matrimonio que le devuelva a su hija, de 7 años, la que les fue vendida por la madre cuando dio a luz. Él desconocía del nacimiento y cuando se entera, contrata a un investigador que ubica a la menor. Ella está enferma y el matrimonio adoptivo que profesa una religión no católica, se niega a aceptar transfusiones sanguíneas. Más bien, la someten a tratamientos experimentales. El padre exige le devuelvan a la niña porque es su hija y él puede hacerse cargo de ella. La denuncia la efectúa en la Policía.
“Estas situaciones, que hemos complicado más para el ejercicio del concurso, ocurren en la vida real”, explica José Alfonso Lip, de la revista Ita Ius Esto. “Lo que pretende esta actividad es acercar a los alumnos a la realidad y responder jurídicamente a los problemas, como demandantes o demandados”, explica.
Agrega que esta simulación permite a los participantes desarrollar las habilidades escritas y orales, el trabajo en equipo, la coherencia y la investigación; además, les demanda esfuerzo y empeño en la preparación, exposición y defensa legal de un caso ficticio que los acerca a la vida jurídica.
