Columna de Opinión escrita por Cesar Cáceres, docente del Programa de Especialización en Gestión del Talento Humano. Publicada en el Diario El Peruano, el 08 de julio del 2017. Hace un tiempo me preguntaba sobre cuáles son las razones para subir por la escalera del éxito en las organizaciones. El sentido lógico me llevaba hacia la socialización. Dependiendo […]
Por Posgrado y Extensión. 04 agosto, 2017.Columna de Opinión escrita por Cesar Cáceres, docente del Programa de Especialización en Gestión del Talento Humano. Publicada en el Diario El Peruano, el 08 de julio del 2017.
Hace un tiempo me preguntaba sobre cuáles son las razones para subir por la escalera del éxito en las organizaciones. El sentido lógico me llevaba hacia la socialización.
Dependiendo del giro del negocio, de los estilos empresariales y de la cultura, podemos ver organizaciones desde las más colectivas e integradas hasta aquellas en las que cada puesto es una isla y tiene muy poca relación con el resto de la organización.
Los colaboradores de las organizaciones, adicionalmente a los objetivos empresariales, persiguen objetivos personales, cada uno dentro de su organización.
En este sentido, conviene analizar las consecuencias positivas de avanzar en la jerarquía empresarial. Por un lado, las expectativas personales sobre el avance propio dentro de la organización generan un sentimiento de satisfacción y de logro que actúa como uno de los principales automotivadores personales. Estos sentimientos no solo suscitan motivos de autorrealización, sino que también trascienden a los demás trabajadores que se comparan con los que destacan. Por otro lado, las propuestas de ascenso de un colaborador con alto potencial producen, en él, un sentimiento espontáneo de felicidad inicial, que luego se va racionalizando a medida que interioriza las nuevas responsabilidades que esto supone. En ambos casos, subir por la escalera jerárquica en la organización aumenta la eficacia laboral de propios y ajenos. Todos en la organización se ven afectados por los movimientos internos y aspiran a ser protagonistas de esta dinámica empresarial. Positivo es fomentar la carrera ascendente dentro de la organización. Es cierto que los colaboradores deben contar con las capacidades profesionales necesarias; pero, eso no es suficiente.
Su llegada al ápice organizacional y al núcleo operativo debe ser plena. Esta buena sociabilización tendrá una consecución en la llegada y la fidelización de clientes y proveedores. Esta es una tarea dentro del planeamiento estratégico. Pertenecer a una organización que fomenta y se preocupa por el crecimiento de sus trabajadores es el mejor premio que un colaborador puede recibir de su organización.