Falta una mejor gestión, necesitamos contar con un equipo con mayor experiencia en este campo, que pueda dirigir y llevar a cabo una estrategia más eficaz.
Por Isabel González. 27 abril, 2020.
Imagen referencias. Tomada de Andina.
Las cifras oficiales del sábado 25 de abril han reflejado, con gran claridad, los resultados de la gestión que realiza el gobierno regional desde el inicio de la pandemia del Covid-19, en nuestra región: desde ayer, somos la región con mayor letalidad, un 11,8% de muertos respecto al total de contagiados.
Lambayeque encabezaba esta lista; pero parece que la presencia del comando Covid en esa región, enviado y liderado por el gobierno central, está teniendo resultados positivos. La letalidad en Lima es de solo 1,8%, mientras que la letalidad media en todas las regiones es 4,5%. Es decir, tenemos una letalidad que es seis veces la de Lima y casi tres veces la media regional del país. Además, hemos pasado de tener 45 fallecidos a 79, casi el doble, de un día para otro.
¿Las causas?, las hemos ido conociendo a lo largo de esta semana a través de denuncias de enfermeras, renuncias de médicos porque no quieren seguir siendo cómplices de esta situación, denuncias de enfermos que no son atendidos, desaparición de pruebas de descarte, informes de la controlaría regional, etc. Falta una mejor gestión, necesitamos contar con un equipo con mayor experiencia en este campo, que pueda dirigir y llevar a cabo una estrategia más eficaz.
Se necesita gestionar el presupuesto destinado desde el gobierno central y agilizar la realización de pruebas de descarte que permita aislar los focos de contagio y conocer con una mayor exactitud el número de contagiados. Y, sobre todo, hace falta habilitar un hospital con las condiciones mínimas necesarias: más médicos internistas trabajando en equipo y que puedan monitorear a los pacientes, y que se puedan emplear las camas de UCI existentes, así como, los respiradores que están ahora sin uso por falta de personal especializado. También se requieren más enfermeras, más técnicos de laboratorio, equipos de oxígeno, respiradores y material de protección para el personal sanitario.
Quizás nunca sabremos cuántos de los 79 fallecidos se hubieran salvado con la debida atención médica. Pero todos sabemos que Piura necesita, urgentemente, que los que ahora lideran esta lucha contra el coronavirus convoquen a los mejores y pidan ayuda al gobierno central para que personas con experiencia y mejores conocimientos técnicos sean quienes gestionen esta situación que podría empeorar aún más. Es hora de trabajar en equipo, y con afán de servicio a la sociedad, para controlar eficazmente esta pandemia.
(Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas en él son de responsabilidad del autor).
