Dos egresados de la UDEP ingresaron a la Academia Diplomática del Perú. Ambos comentan la relevancia del bien común en sus vidas y las razones por las que eligieron una carrera de servicio.
Por Hayrond Córdova. 22 mayo, 2020.Josemaría Díaz Inga (Ciencias Económicas y Empresariales) y Beto Daniel Wong Gálvez (Ingeniería), egresados de la Universidad de Piura, ingresaron a la Academia Diplomática del Perú Javier Pérez de Cuéllar, luego de un intenso periodo de estudio. Los dos nuevos alumnos, del primer año de esta importante institución alcanzaron una vacante, con otros 23 jóvenes del país.
“Siempre cultivé el deseo de poder canalizar mis conocimientos y habilidades al servicio de los demás. Mi formación académica estuvo acompañada de una formación en valores, tanto en la etapa escolar como en la universitaria”, dice Beto Wong, ingeniero mecánico eléctrico. Al respecto, Josemaría Díaz, administrador de empresas y contador, agrega: “Este logro no hubiera sido posible sin la ayuda de nuestros familiares, profesores y amigos.”
El embajador Allan Wagner, director de la Academia Diplomática del Perú, expresó sus felicitaciones a todos los nuevos ingresantes: “Ustedes han pasado a integrar esta casa de estudios, siendo así herederos y parte de su historia. Los invoco, pues, a ser conscientes de la responsabilidad que ello conlleva y a poner lo mejor de sí para formarse en los valores y los conocimientos que les serán impartidos”.
¿Qué debe tener un diplomático?
El servicio diplomático busca a los más dedicados y, principalmente, a los que quieran trabajar por su país. La carrera es multidisciplinaria y ofrece diversas oportunidades para desempeñarse en distintos ámbitos, lo que permite enriquecer la vida profesional y personal del servidor diplomático, expresan los egresados de las facultades de Ingeniería y Ciencias Económicas y Empresariales de la UDEP.
Además, coincidieron en destacar el servicio que se le da a la ciudadanía, a través de la labor que realizan. “Cualquier renuncia individual que pueda conllevar esta carrera nunca será suficiente, si de defender los intereses nacionales se trata. El servicio diplomático es un compromiso de vida serio y de largo plazo”, dice Josemaría.
En tanto, Beto sostiene: “Lo principal al elegir esta profesión debe ser el amor a la patria, la voluntad de servicio y cuidar los intereses nacionales. La mejor retribución es mejorar la calidad de vida de nuestros connacionales”.
La Academia Diplomática del Perú es el centro superior de formación profesional e investigación del Ministerio de Relaciones Exteriores. Representa la única vía de acceso a la carrera diplomática. Es responsable de la formación integral de los aspirantes al Servicio Diplomático, así como del continuo perfeccionamiento de sus funcionarios.