Carlos Llanos, gerente general de LLYC de Ecuador y egresado de la UDEP (1998), da algunas pautas para que las empresas asuman la nueva normalidad y recuperen la confianza en época de incertidumbre.
Por Elena Belletich Ruiz. 16 julio, 2020.El egresado de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Piura y gerente general de la consultora internacional Llorente y Cuenca, LLYC, en Ecuador, compara la situación que vive el mundo, debido al coronavirus, con un fenómenos natural: “es como si todos estuviéramos en el ojo de un huracán”.
Con esta referencia, el comunicador Carlos Llanos señala que es importante que las empresas “se abran paso en medio de la inundación y aprovechen las ráfagas que produce el huracán para revisar o rediseñar el propósito de las organizaciones con miras más elevadas: cruzar de la gestión de los riesgos a la gestión de las oportunidades, de la responsabilidad al compromiso, a la implicancia empática, a participar activamente en el desarrollo de las soluciones, a la cocreación de valor de la mano de los stakeholders, al impacto más allá del resultado”.
El profesional, con 20 años de experiencia en los distintos niveles de la organización LLYC, dice que, en estos momentos, las empresas tienen prioridades inmediatas que deben atender, entre ellas: “ver cómo recuperarse y relanzar su actividad; cómo influyen en las decisiones que se van a tomar (políticas, económicas y sociales) y que van a condicionar el futuro próximo de su sector y de su propia compañía”.
Asimismo, deben plantearse: “cómo manejar el equilibrio en la inversión de mis recursos entre el regreso a mis mejores hábitos y la puesta en funcionamiento de los cambios que requiere el nuevo contexto; cómo financio ese esfuerzo en un momento tan crítico; o cómo reorganizo y mantengo motivado y alineado a mi equipo”.
En definitiva, dijo, los empresarios y directivos deben saber “cómo continuar avanzando hacia un esquema de liderazgo responsable y eficaz que genere, fortalezca o recupere de forma mucho más proactiva, la confianza de los grupos de interés, cuyas prioridades hoy ya han cambiado. Recuérdese que todos ellos están junto con nosotros dentro del mismo ciclón”, anota el experimentado comunicador.
Lecciones que deja el COVID- 19
Carlos Llanos refiere que, de esta pandemia que ha afectado al mundo, se pueden extraer algunas lecciones como: “la necesidad de responder con agilidad a la ‘nueva normalidad’; pensar siempre en cuál será el siguiente desafío; pasar de ser capaces de prever, a ser capaces de predecir”.
“Quienes apuestan por la preparación y la anticipación consecuente, luego de asumir su nueva condición en medio de este huracán -cuyas dimensiones lo convierten en uno de los escenarios disruptivos jamás vividos-, y sacan partido del potencial de los hallazgos para el resurgimiento y la conservación de su legado, encontrarán naturalmente en la comunicación -gestionada siguiendo el guion de su narrativa (storydoing)- la mejor herramienta para transitar este tiempo turbulento con garantía”, indica Llanos.
“El estar un paso por delante es clave para abrazar con éxito la nueva normalidad. No es sencillo, pero es necesario para sobrevivir”, recalca.
Como propuestas para mejorar la relación de las empresas con sus trabajadores, Carlos Llanos esboza las siguientes:
- Propiciar, hoy más que antes, la comunicación, la colaboración (equipos cohesionados y diversos), la transparencia y la innovación al interior de las organizaciones.
- Tener una comprensión profunda de qué les está pasando a los profesionales y, para ello, lo primero es escuchar e identificar cuáles son sus problemas y construir a partir de lo que las personas necesitan oír.
- Acelerar la transformación digital; pero, al mismo tiempo, también la transformación cultural.