La función más importante de este ecosistema es mantener los hábitats marino - costeros y la provisión de alimento y refugio para una gran variedad de organismos a diferentes niveles tróficos.
Por Rodolfo Rodríguez Arismendiz. 23 julio, 2020.Ante la proximidad del Día Internacional para la Defensa de Ecosistemas de Manglar (26 de julio) es necesario reflexionar sobre la importancia de estos ecosistemas costeros, propios de regiones tropicales. Se caracterizan por su vegetación, que crece cerca a desembocadura de ríos. El bosque de estos ecosistemas está conformado, en su mayoría, por árboles de mangle, adaptados a soportar elevadas concentraciones salinas.
Su función más importante es mantener los hábitats marino – costeros y la provisión de alimento y refugio para una gran variedad de organismos a diferentes niveles tróficos. También son una fuente económica importante para las comunidades aledañas que dependen de la pesca artesanal para su subsistencia.
La estructura funcional de este ecosistema permite que se acomoden a la variabilidad que induce el cambio climático. Para analizar esta capacidad y visualizar medidas de mitigación, es preciso comprender su dinámica, el papel ecológico de sus componentes estructurales y estimar económicamente sus funciones ecológicas.
Las principales amenazas a que enfrentan son el cambio climático (especialmente el aumento del nivel del mar), los desarrollos urbanísticos, la sobreexplotación de los recursos y los cambios en el uso del suelo.
En América, los manglares se distribuyen desde Baja California hasta Perú, en la costa del Pacífico; y desde la Florida hasta Brasil, en la costa Atlántica. En Perú, hay manglares en Tumbes y en Piura y constituyen el límite sur de manglares en la costa del Pacífico.
Existen más de 20 especies de mangle, de las cuales hay ocho en América: cinco de ellas en Perú, ubicadas en el Santuario Nacional Los Manglares de Tumbes (SNLMT). Y, dos de estas especies también se hallan en el Santuario Regional Manglares de San Pedro de Vice en Piura.
Tenemos entonces que en el SNLMT se encuentran estas especies de mangle: Conocarpus erectus (mangle piña), Rhizophora harrisonii (mangle colorado), Rhizophora mangle (mangle rojo), Avicennia germinans (mangle negro) y el Laguncularia racemosa (mangle blanco). Estos dos últimos también están en Vice.
En cuanto a las amenazas a los manglares de Perú, tenemos la contaminación por los ríos, la pesca no regulada, la tala y quema del manglar y del bosque seco aledaño, la modificación de los flujos de agua por la apertura de canales o desvíos realizados por las langostineras que funcionan en las zonas de amortiguamiento y la agricultura que se desarrolla en las márgenes de los ríos, entre otros.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas en él son de responsabilidad del autor.