En el inicio del Ciclo de conferencias de Comunicaciones de Marketing, Venegas explicó cómo se gestionó la reputación y qué acciones de comunicación se realizaron en Industrias San Miguel, tras la crisis del COVID-19.
Por Betsy Salazar Guerrero. 02 noviembre, 2020.
Eduardo Venegas, jefe de Comunicaciones y Responsabilidad Social de Perú y Chile de Industrias San Miguel y egresado de la Facultad de Comunicación, expuso: “El COVID-19 y su impacto en la reputación: el caso de ISM”, en el primer ciclo de conferencias sobre comunicación, marketing y publicidad organizado por el programa académico de Comunicaciones de Marketing de la UDEP.
La crisis del COVID-19 trajo diversos problemas para las empresas; sin embargo, afirmó Venegas, en Industrias San Miguel se convirtió en oportunidad gracias al trabajo realizado por el equipo humano y directivo. “Consideramos que el coronavirus es un proceso de aprendizaje para todas las compañías en general porque también ha generado muchas cosas buenas y entre ellas está la aceleración de la transformación digital”.
En un momento de crisis, dijo Venegas, todas las decisiones que tome la compañía influyen en su imagen y en la percepción que tengan los diferentes públicos sobre la empresa. Por eso, el papel del área de comunicación es fundamental para evaluar la repercusión de cada decisión que se tome. Cada vez estamos más conscientes de que somos los guardianes de la reputación de las organizaciones, expresó.
“El comunicador no debe desatender la marca corporativa ante las crisis, porque termina siendo ese paraguas que permite proteger a la compañía”, dijo.
Trabajo en equipo
“En ISM, la pandemia se ha ido resolviendo de la mejor manera gracias al gran trabajo de equipo y porque contamos con una cultura organizacional consolidada”, anotó Venegas. Esta crisis, aseveró, puso a prueba los cimientos que veníamos construyendo hace varios años, sostuvo el jefe de Comunicaciones de ISM.
El comunicador explicó que la reputación cumple un papel importante en esta pandemia. Para gestionarla adecuadamente, ISM realizó varias acciones y estrategias a través de contenidos específicos para los públicos internos y externos, así como para las familias de los colaboradores lo que ayudó a reforzar los lazos entre la empresa y el trabajador.
Asimismo, refirió que se gestionó el capital humano, estructural y relacional para conformar la comunicación de la organización. La organización tuvo como reto sumar el capital intelectual con la cultura del aprendizaje en el que la comunicación fue la guía para cada uno de los equipos de trabajo.
Por otro lado, el egresado explicó que en esta etapa no solo se pedía que las empresas dieran mensajes de aliento, sino que se pase a la acción de una manera más rápida. Por ello, dentro de toda la estrategia de ISM se buscó pasar del storytelling al storydoing, que no solo basta contar bonito sino hacer algo y llegar a las audiencias.
Agregó que el trabajo arduo que de comunicación se refleja en el comportamiento de los trabajadores y en algunos rankings de reputación como Merco en los que la empresa ha mejorado 20 posiciones gracias a las buenas acciones ejecutadas.
Venegas aconsejó que en esta etapa más que nunca se piense en grande, se trabaje con pasión, se tenga empatía, y se trate de repensar y actuar con velocidad, escuchar y comunicar para mantener la confianza. “Esta ha sido la oportunidad para que en el directorio y gerencia de la compañía se revalore la comunicación como un área estratégica pues lo que se pide ahora es que el comunicador tenga una visión 360 grados de la compañía”, resaltó.
