La Comisión Multipartidaria aprobó el proyecto de Ley Marco del Sistema Integrado Universal de Pensiones (SIUP), que integraría al Sistema Nacional de Pensiones (SNP), Privado de Pensiones (SPP), Pensión 65 y el programa Contigo.
Por Koko Zavala. 01 febrero, 2021.El mencionado proyecto, cuyo debate en el pleno del Congreso se ha previsto para este mes (febrero), contempla entre otros cambios la afiliación automática de toda persona al SIUP, desde el momento que adquiere su DNI. En los trabajadores dependientes, un porcentaje del aporte está a cargo del trabajador (entre el 4% y 13 % de la remuneración), y en el caso de los independientes, las aportaciones están en función a las rentas declaradas ante la Sunat.
También prevé que los afiliados de las AFP pasarán al nuevo sistema con los fondos acumulados y sin ningún descuento; mientras que los del SNP pasarán al Sistema Integrado Universal de Pensiones con un bono de reconocimiento, como explica el profesor Jorge Gallo Costa. Los afiliados tendrán un Fondo de Riesgo Compartido (FRC) a cargo del organismo público de pensiones y un Fondo de Riesgo Individual (FRI). La recaudación de los aportes estará a cargo de la Sunat.
Hacia un sistema injusto
Jorge Gallo Costa, máster en Dirección y Gestión Empresarial y profesor de la Universidad de Piura, señala que el trasfondo de este proyecto es la desactivación de las AFP y que los fondos de jubilación de cada afiliado sean administrados por la Autoridad del Sistema Integrado de Pensiones (ASIP).
“La ASIP, como organismo público especializado con autonomía funcional, económica, técnica, financiera y administrativa, se encargará de planificar, gestionar y promover el funcionamiento del SIUP. Pero, está por verse si lo hará o no de manera eficiente”, advierte Gallo.
Señala, asimismo, que tal como está planteado el proyecto de ley, “se pretende que el Estado administre esta millonaria cantidad de dinero, cuando la historia dice que este es un pésimo gestor en temas pensionarios. Además, siempre existirán riesgos políticos de decisiones sesgadas o la tentación de confiscar los mismos en algún momento y bajo cualquier pretexto”.
Refiere, además, que el proyecto aprobado por la comisión parlamentaria, “plantea también que una parte del aporte de cada afiliado sirva para subsidiar a terceros lo cual es, a todas luces, injusto y propio de un sistema comunista”, sostuvo.
El docente universitario subraya que el actual Sistema Privado de Pensiones (SPP) es deficiente por donde se le mire y que “las AFP han tendido un comportamiento abusivo con sus afiliados, dando la sensación de que siempre se han opuesto a cualquier proyecto a favor de estos, uno de ellos el régimen de jubilación anticipada (REJA)”. Con respecto a esto, dice, sería necesario conocer “si algún gerente o miembro del directorio de estas AFP o de la Asociación que las une, se ha acogido al REJA, por ejemplo, porque de ser así, habría una total incoherencia entre o que dicen y lo que hacen”.
Sin perjuicio de lo anterior, Gallo señala que “se pretende remediar esta deficiente, pero subsanable gestión, con un nuevo sistema que será, a todas luces, no solo ineficiente, sino que cambia las reglas de juego a los afiliados al SPP. Urge mejorar tanto el sistema pensiones, público y privado; pero, lo planteado no mejora las condiciones de los aportantes a las AFP, sino que pone en riesgo su esfuerzo de tantos años”.
Gallo sugirió que los especialistas en Derecho “se pronuncien en cuanto a la constitucionalidad de esta propuesta e informen cuáles son los caminos legales para detenerla, de esta manera se hará sentir a los parlamentarios, el rechazo a este despropósito”. Además, sugirió que seamos informados si los congresistas que defienden esta propuesta “están afiliados a alguna AFP, o tal vez ya se acogieron al régimen de jubilación anticipada y por eso tienen nada que perder”, anotó.