Akhiza Yoeli Saavedra Navarro, egresada de la Facultad de Derecho, sustentó su tesis para obtener el título de abogado logrando la calificación de sobresaliente, el pasado 30 de abril. Akhiza defendió su trabajo de investigación titulado “El orden de los apellidos: ¿imposición o elección?” ante el jurado compuesto por la doctora Maricela Gonzáles Pérez de […]
Por Sabrina Román. 07 mayo, 2021.Akhiza Yoeli Saavedra Navarro, egresada de la Facultad de Derecho, sustentó su tesis para obtener el título de abogado logrando la calificación de sobresaliente, el pasado 30 de abril.
Akhiza defendió su trabajo de investigación titulado “El orden de los apellidos: ¿imposición o elección?” ante el jurado compuesto por la doctora Maricela Gonzáles Pérez de Castro, la magíster Lelia Díaz Tarrillo y la abogada Sophía Delgado Martínez.
En su investigación, Saavedra propone formular un nuevo proyecto de ley que norme de manera más completa y elocuente, incorporando ciertos límites al derecho de libre elección del orden de los apellidos que se plantea en el parlamento peruano.
Mientras que en otros países se regula el cambio del orden de los apellidos interpretando las normas en función al principio de igualdad y a los derechos humanos, con el fin de disminuir el margen de discriminación entre hombres y mujeres ante la ley. En el Perú por costumbre, se ha venido colocando primero el apellido del padre y en segundo lugar el de la madre. Sin embargo, nuestro ordenamiento jurídico únicamente regula el cambio de nombre por excepción a la norma por “motivos justificados” que, por no encontrarse consignados de manera taxativa, se deja a criterio de los jueces la interpretación de estos. Esta interpretación se encuentra estrictamente relacionada con la protección no solo del derecho a la identidad sino también del derecho al honor y a la buena reputación.
En ese sentido, los proyectos de Ley que han venido siendo impulsados por los parlamentarios peruanos, si bien buscan permitir la libre elección del orden de los apellidos, lo cierto es que, lejos de centrarse en lo que proponen, obedecen más a intereses políticos del momento, de manera que, estas propuestas han sido planteadas muy a la ligera y de manera muy escueta.
Por todo ello, Akhiza defiende formular un nuevo proyecto de ley más completo y específico; incluyendo sus límites, en la medida que, como todo derecho, es preciso limitarlo para efectos de que éste no choque con otros derechos que también tienen el carácter de fundamental.