Rosa Monzón y Yumily Artuza, egresadas de la Maestría en Matrimonio y Familia (MMF), sustentaron un estudio sobre el denominado ‘partner phubbing’, comportamiento relacionado con el uso excesivo de los teléfonos inteligentes.
Por Instituto de Ciencias para la Familia. 14 junio, 2021.“Relación entre el partner phubbing y la comunicación conyugal en personas casadas o convivientes con edades comprendidas entre 25 y 55 años residentes en Perú” es la investigación sustentada por las egresadas de la Maestría en Matrimonio y Familia del Instituto de Ciencias para la Familia de la UDEP.
En su estudio, Rosa Monzón y Yumily Artuza indican que los matrimonios y las relaciones conyugales se ven afectados por la presencia de este comportamiento llamado partner phubbing, que obstaculiza y socava la comunicación, la satisfacción conyugal y el bienestar personal.
En la actualidad, el uso excesivo del teléfono inteligente se ha convertido en una epidemia denominada phubbing, término que tiene su origen en la fusión de las palabras inglesas “phone” -teléfono- y “snubbing” -despreciar-. Se define como el acto de ignorar a la persona que se tiene a un lado por prestar mayor atención al teléfono inteligente. Cuando se ignora específicamente al cónyuge se denomina partner phubbing o simplemente Pphubbing.
La investigación – que contó con la participación de 192 mujeres y 150 varones – surgió como una inquietud a lo que diariamente cada una de las autoras observó en espacios públicos, privados y también familiares. “En aquellos lugares y momentos donde debería existir una comunicación fluida y efectiva entre los esposos o convivientes, esto no surgía debido al uso excesivo del teléfono celular”, señalaron.
Este estudio es la primera investigación de este tipo aplicada en el país. Sus hallazgos muestran que se identificó la existencia del partner phubbing en personas casadas o convivientes, con edades comprendidas entre 25 y 55 años, residentes en el Perú, de acuerdo con los indicadores: conflicto con el uso del teléfono celular y uso desmedido del teléfono celular.
Por otro lado, se determinó una tendencia a reportar un alto impacto del partner phubbing en la satisfacción conyugal y bienestar personal. En este aspecto, Monzón y Artuza señalaron que “es necesario cuidar aquellos momentos compartidos con los cónyuges con las propias actitudes relacionadas al uso del teléfono celular, trabajando la voluntad, el querer ‘querer’, sabiendo priorizar ‘nuestro’ vínculo conyugal antes que cualquier otro”.
En lo que respecta a las anomalías de la comunicación conyugal detectadas, se concluye que hay presencia de temor, desconfianza e indiferentismo. “Estas anomalías se encuentran en el nivel medio, lo cual permite concluir que se deben cuidar aspectos como el tono de voz, buenos hábitos de escucha, comprensión y paciencia entre otros, de tal manera que la incidencia sobre la relación conyugal sea baja en lugar de media”, dijeron.
El estudio permite determinar que sí existe relación significativa negativa entre el partner phubbing y la comunicación conyugal; pues perjudica la calidad del diálogo hasta en un 29%.
“Indiscutiblemente el partner phubbing, menoscaba la comunicación entre los esposos; es decir, afecta negativamente la capacidad para entenderse, escucharse y expresarse comprendidas en el proceso de comunicación; así como el sistema de cariño y admiración y conexión emocional, los cuales son muy importantes para superar situaciones adversas. Considerando que el matrimonio y la convivencia no se encuentran exentos de experimentar momentos difíciles, estos aspectos podrán ser una fortaleza en la relación de pareja si se cuidan y cultivan”, concluyen las investigadoras.
La profesora Gloria Huarcaya, asesora de contenido, destacó que este trabajo ha permitido validar dos cuestionarios (uno sobre el partner phubbing y otro sobre la comunicación conyugal) para el contexto peruano. Por su parte, la profesora María Mercedes Henríquez, asesora metodológica, destacó la rigurosidad de la investigación.