Los periodistas y sus medios tienen una función de vigilancia en la sociedad y una función fiscalizadora, que deben ejercer con responsabilidad, independencia y criterio ético, aunque haya dificultades.
Por Rosa Zeta de Pozo. 01 octubre, 2021. Publicado en El Tiempo, el 1 de octubre de 2021.
Hoy, 1 de octubre celebramos el Día del Periodista en el Perú, es bueno que podamos reflexionar sobre la importancia de nuestra profesión y sobre nuestro rol en la sociedad, en un momento poco propicio para su ejercicio pleno.
En este siglo XXI, donde se acrecienta la necesidad de información para crecer en comunidad, el deber profesional del periodista es satisfacer el derecho a la información del público, en un entorno de libertad y de búsqueda del bien común.
En este contexto, recordamos con la Organización de las Naciones Unidas, que es oportuno reconocer y promover la idea de la información como un bien común, como algo que ayuda a fomentar las aspiraciones colectivas y que constituye la pieza clave del conocimiento. Como bien común con potencial de alcance universal, la información nos permite conocer nuestros derechos y prerrogativas, además de contribuir al interés general, al servicio del desarrollo sostenible.
Es importante el papel de los periodistas para la producción de información fiable. Es el periodista el que dota a la información, como bien común, de las cualidades requeridas: ser verdadera, procedente de voces autorizadas, completa, verificada, contextualizada, oportuna, imparcial, adecuada, plural, accesible. Para ello, también es necesario contar con la libertad para acceder a la información, investigar y difundir.
Y aquí, el Gobierno tiene el rol fundamental de cumplir su función en el ámbito informativo: de garantizar y respetar la libertad de información, el acceso a la información pública, asumir que los gobernantes están sujetos al control social y que los medios cumplen ese papel como mediadores entre el Estado y la ciudadanía. Al Gobierno le interesan medios independientes que le informen de la realidad.
Los periodistas y sus medios tienen una función de vigilancia en la sociedad y una función fiscalizadora, que deben ejercer con responsabilidad, independencia y criterio ético, aunque haya dificultades. Si no lo hacemos así, deslegitimamos nuestra profesión y nuestra misión en la sociedad. ¡Asumamos este desafío!
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
