El urbanismo paisajista nace como reacción al urbanismo racionalista, el cual busca dar prioridad a grandes autopistas, sin tomar en consideración el lugar que se va a diseñar ni a las personas que lo usarán.
Por Dirección de Comunicación. 12 octubre, 2021. Publicado en El Tiempo, el 12 de octubre de 2021.
Artículo escrito por la profesora Cristina Wong, del programa académico de Arquitectura.
La modernización conllevó a dar espaldas a paisajes naturales en aras del crecimiento urbano. Este panorama se refleja en ciudades del mundo que se encuentran fuera de control; sin embargo, esto no debería tomarse como una debilidad, sino como una oportunidad de cambio, así como un llamado para la colaboración entre las disciplinas de Urbanismo, Paisajismo, Ecología, Arquitectura, Geografía, Ingeniería y Sociología.
El urbanismo paisajista nace como reacción al urbanismo racionalista, el cual busca dar prioridad a grandes autopistas, sin tomar en consideración el lugar que se va a diseñar ni a las personas que lo usarán. Esto conlleva a nuevas realidades, las cuales tienen la oportunidad de convertirse en agentes de cambio.
Uno de los principales factores de riesgo durante las pandemias es el cambio de uso de suelos, debido a la intensificación de la agricultura y la ganadería, ya que, al quebrantar el equilibrio natural, las infecciones zoonóticas ––capaces de mutar de animales a personas–– se encuentran en alarmante aumento, como en el caso del COVID-19. Además, debido al cambio climático, el peligro de inundaciones se intensifica, ya que se generan nuevos patrones climáticos como el Niño Costero, el cual tuvo consecuencias aún más devastadoras que las causadas por el Fenómeno El Niño.
El urbanismo paisajista aspira a realizar una lectura de los paisajes actuales y, consecuentemente, proponer diversas exploraciones, como soluciones basadas en la naturaleza, de modo que se diseñen ciudades resilientes y adaptables capaces de responder a los riesgos provenientes de eventos extremos generados por el cambio climático. De este modo, el diseñar, enfocándose principalmente en las dimensiones sociales y ecológicas, no debe, necesariamente, dejar de lado dimensiones urbanas, económicas o políticas.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
