Ante la proximidad de la presencialidad, la directora de estudios de la UDEP y el director de estudios de Campus Lima resaltan el valor del contacto personal en el modelo educativo de nuestra universidad.
Por Gabriela Hernández. 17 febrero, 2022.El 21 de marzo, la Universidad de Piura iniciará el ciclo académico 2022-I, que marcará el regreso paulatino de sus estudiantes a las aulas, luego de dos años de educación virtual. La magíster Patricia Soto, directora de Estudios de la Universidad de Piura, destaca la importancia que han tenido los espacios digitales durante todos estos meses de enseñanza virtual. “Esta situación resultó profundamente enriquecedora y valiosa, ya que permitió descubrir las potencialidades de la virtualidad como herramienta educativa y de trabajo”.
Sin embargo, recalca que, para la Universidad de Piura, “el contacto personal (el trato personalizado) es vital en nuestro modelo educativo de formación integral. Las personas necesitamos comunicarnos, expresarnos; y, lo hacemos no solo con la voz o la escritura, sino también con la mirada, con los gestos”, refiere.
En la misma línea, el director de estudios de Campus Lima, el magíster Ricardo Ormeño, agrega que, los espacios de diálogo formal e informal, la construcción de amistades duraderas, los encuentros “de pasillo”, las actividades deportivas, la posibilidad de atender las necesidades particulares de cada estudiante, entre otras muchas oportunidades de encuentro y comunidad “permiten llegar con más profundidad a todas las dimensiones del ser humano (en especial la humana y la espiritual), lo que favorece la dimensión académica”, dice.
Así, la presencialidad hace posible cumplir plenamente el ideario de la Universidad de Piura, expresan.
El retorno a las aulas
El regreso paulatino a las aulas estará acompañado, en un primer momento, por la educación virtual, debido a las restricciones normativas referidas al retorno a clases, explica el director de Estudios de Campus Lima. Esto, agrega, no será un obstáculo para retomar el trato personal que caracteriza a la comunidad UDEP, y beneficiará la incorporación de las tres promociones de alumnos ingresantes que todavía no han “pisado” el campus.
Indica también que el compartir los espacios en el campus favorecerá el proceso de aprendizaje, ya que permitirá que la enseñanza transcurra en las aulas, que son un entorno adecuado; y fomentará una mejor conexión entre estudiantes y docentes, que se sentirán más motivados, enfatiza el también profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales.
Aprendizaje y trabajo en conjunto
Por su parte, la magíster Soto afirma que trabajar y estudiar con los pares es enriquecedor. “Los alumnos participan en distintos proyectos de investigación, de asistencia al profesor, de voluntariado, y “trabajar con” permite profundizar en el estilo de la universidad: trabajo bien hecho, exigente y centrado en la persona, el trato uno a uno”, explica.
Este trato personal propiciado por la presencialidad, refiere la directora de estudios de la UDEP, fomenta que las personas se vuelquen a las necesidades de los demás, les permite hacerse cargo y potenciar las relaciones entre pares, concluye.