El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que se caracteriza por síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad que lleva a dificultades en el ámbito educativo, familiar y social.
Por Milagros Tapia Montesinos. 13 julio, 2022.El 13 de julio del 2019 se declaró el Día Nacional de Sensibilización sobre el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) de acuerdo a la Ley N.° 30956 aprobada el 15 de mayo de ese año.
¿Qué sabemos del TDAH?
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que se caracteriza por síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad que lleva a dificultades en el ámbito educativo, familiar y social. Es el trastorno más frecuente en la infancia y la adolescencia, afecta aproximadamente al 4% de la población en edad escolar (con más prevalencia en los niños que en las niñas). El TDAH tiene un 70 – 80% de heredabilidad, pero también existen otros factores de riesgo como la prematuridad, el consumo de alcohol o drogas durante el embarazo de la madre, falta de oxígeno del niño durante el parto, etc.
Si bien es cierto el TDAH se inicia en la infancia, puede prolongarse en la vida adulta. En la etapa escolar, el TDAH se manifiesta principalmente en alteraciones del comportamiento, actividad física excesiva, problemas de atención, dificultad para inhibir respuestas, bajo rendimiento escolar, problemas de interacción social y, en algunos casos pueden presentar baja autoestima. Asimismo, no todos los niños con TDAH manifiestan los mismos síntomas ni con la misma intensidad. Un diagnóstico temprano es fundamental para el éxito del tratamiento.
El TDAH no solo afecta a los niños, también se presenta en el adulto.
El TDAH afecta al 2,8% de los adultos, tiene consecuencias en su salud, trabajo y relaciones personales y aproximadamente la mitad de ellos tiene otro trastorno adicional. Los adultos con TDAH tienen dificultades para organizarse, retrasos y olvidos frecuentes, se distraen fácilmente, tienden a llegar tarde y pueden ser menos productivos. Asimismo, debido a sus problemas de impulsividad pueden tener más accidentes, más movilidad laboral, y problemas en sus relaciones personales. Aunque el adulto con TDAH tiende a tener menos síntomas de hiperactividad, suele presentar una inquietud interior y una desregulación emocional (incapacidad para modular sus respuestas emocionales, son irritables, impacientes, etc.).
Tratamiento
Diferentes estudios coinciden en que el tratamiento con mayor efectividad a la hora de trabajar con el alumnado con TDAH es el multidisciplinar (o multimodal). Es decir, se requiere de un tratamiento psicológico, psicopedagógico y farmacológico. Asimismo, en el tratamiento tienen que participar los padres, el niño y los profesores. Es importante que los padres sean conscientes de que la mejoría no se logrará de la noche a la mañana; será un proceso gradual, dependiendo de la gravedad del trastorno y también de la intensidad del tratamiento que reciba el niño.
Recomendaciones para los padres durante las vacaciones de medio año: Es conveniente evitar que el niño pierda su rutina. Para ello, se sugiere:
– Continuar con el tratamiento que viene recibiendo.
– Mantener las rutinas de comidas, horarios de sueño, baño. En caso no sea posible, conviene planificar con tiempo otras opciones adaptadas a la etapa de vacaciones.
– Combinar su horario con otras actividades (practicar deporte, taller de música, taller de pintura, etc.).
– Si van a viajar, hacerlo partícipe al niño en la preparación y planificación del viaje.
– Premiar con elogios su esfuerzo.
– Ayudarle a planificar el tiempo que necesita para sus actividades extraordinarias.
– Elaborar un listado de juegos o actividades recreativas que le gusten al niño.
– Recordarle las reglas y lo que la familia espera de él.
– Controlar el tiempo frente a las pantallas.