En una emotiva ceremonia, y ante unas 200 personas, el doctor Benavent, exdocente de la Facultad de Ingeniería y exdirector del Instituto de Hidráulica, fue investido como profesor emérito de la universidad.
Por Fernanda Vegas Sernaqué. 06 junio, 2024.
En el acto, académico y familiar, realizado en la Universidad de Piura, se dieron cita autoridades académicas, profesores, egresados y amigos cercanos del homenajeado, doctor Ignacio Benavent Trullenque.
Esta investidura como profesor emérito es una categoría de profesor extraordinario que reconoce el prestigio y experiencia del homenajeado en el ámbito académico, como profesor universitario; y, su valiosa contribución a la institución y a la comunidad.
Además del doctor Benavent, conformaron la mesa de honor, la vicerrectora académica, doctora Susana Vegas; el decano de la Facultad de Ingeniería, magíster Jorge Machacuay; y el vicedecano académico de la facultad, doctor Martín Palma.
Además de un diploma de reconocimiento como profesor emérito, las autoridades de la UDEP le entregaron un photobook que recoge una secuencia fotográfica de su trayectoria y un set de piscos y copas.
“A Nacho lo definimos con dos palabras: amor y humor”
Durante la ceremonia, se presentaron distintos testimonios de quienes trabajaron con el ingeniero Ignacio Benavent durante su paso por la UDEP. El doctor en Ingeniería Jorge Reyes Salazar esbozó una semblanza sobre el recorrido profesional y personal del distinguido docente e investigador. “A Nacho lo podemos definir con dos palabras: amor y humor. Amor a Dios, a las personas, a la naturaleza, a la Universidad de Piura; y, humor permanente; ese humor que le viene de saberse hijo de Dios, quien nos pide que seamos felices”, sostuvo.
Sobre el amor demostrado por Nacho Benavent a lo largo de su carrera profesional, Reyes Salazar mencionó que llegó a Perú en 1964, año en el que se graduó como ingeniero industrial por la Universidad Politécnica de Madrid. Desde su llegada, trabajó en Cañete con Radio ERPA (Escuelas Radiofónicas Populares Americanas), que transmitía clases sobre agricultura y economía. Este trabajo dio lugar a la fundación del Instituto Rural Valle Grande, un centro de formación técnica y profesional.
En 1984, dejó Cañete y se trasladó a Lima para ser parte del equipo fundador de los colegios Alpamayo y Salcantay, hoy grandes centros educativos de primer nivel. En 1987, llegó a Piura y, hasta 1997, desempeñó el cargo de director de Instituto de Hidráulica, Hidrología e Ingeniería Sanitaria. En su faceta docente, durante sus 27 años impartió el curso de Mecánica de Fluidos a estudiantes de Ingeniería Civil e Ingeniería Industrial y de Sistemas, dejando una huella significativa en la formación de futuros ingenieros.
Sobre el humor propio de la personalidad de Ignacio Benavent aún en épocas difíciles, el profesor Reyes contó que, en 1990, en medio de la inflación, el terrorismo y los constantes cortes de energía, el Instituto de Hidráulica estaba investigando dos modelos hidráulicos con cronogramas muy ajustados.
«El ambiente era de preocupación, tristeza y un poco de desesperanza por los cortes de energía. Pero, Nacho se puso a cantar, eso nos bajó la tensión, nos tranquilizó y nos dijo: “Cualquier cosa les puede afectar, pero la clave es pensar: un momentito, yo no estoy solo, la tristeza es para los que no creen en Dios”», recordó Reyes.
“Nacho, has corrido por todo el Perú”
El rector de la UDEP, Antonio Abruña Puyol, también recordó algunas de las contribuciones y aficiones del doctor Benavent, sobre todo, su afición de correr. “Nacho, has corrido, literalmente, por el Perú ―en alguna ocasión te he acompañado en una de tus maratones solitarias, yo siguiéndote en carro, por supuesto―”, contó.
Las rutas de “Nacho”, le han permitido recorrer gran cantidad de localidades en la costa, sierra y selva del Perú; además, de lograr hazañas como subir y bajar el Huascarán en un día. Más allá de estas experiencias, el rector Abruña agradeció un recorrido en especial: “Has corrido mucho y agradecemos a Dios y a ti que, buena parte de esas correrías las hayas realizado en y desde la Universidad de Piura, que tanto tiene que agradecerte. Sigue paseando por la universidad y soñando con lo mucho que aportará para el bien del Perú y de sus ciudadanos”, concluyó.
“Nuestro mejor aporte a la sociedad”
Antes de culminar la ceremonia, el doctor Benavent Trullenque expresó su agradecimiento por el reconocimiento recibido. Compartió anécdotas de su vida profesional y personal, destacando el espíritu de equipo y la dedicación de sus colegas y estudiantes. También enfatizó la importancia de conocer y comprender el agua para poder diseñar soluciones efectivas y subrayó su compromiso con la formación integral de los estudiantes.
“La tarea de enseñar y formar integralmente a nuestros alumnos siempre ha sido una prioridad. Los profesores hemos dedicado todo el tiempo necesario al asesoramiento y preparación de clases y evaluaciones porque los alumnos son nuestro mejor aporte a la sociedad”, refirió.
Finalmente, expresó su gratitud hacia la Universidad de Piura, reconociendo la influencia positiva de la institución en su vida y carrera. Cerró su discurso recordando la importancia de la fe, la alegría y el esfuerzo en el trabajo.
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