La doctora Rosdali Díaz Coronado, directora ejecutiva del Departamento de Oncología Pediátrica del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), brindó una clase magistral sobre estrategias para prevenir el deterioro en pacientes pediátricos oncológicos.
Por Luis Delgado Rivadeneyra. 16 octubre, 2024.El 4 de octubre, en el marco de la Semana de la Facultad de Medicina Humana de la Universidad de Piura (UDEP), se llevó a cabo una clase magistral titulada “Ciencia de la implementación en Oncología Pediátrica: de la teoría a la práctica”. En este evento, la doctora Díaz expuso sobre la implementación de la Escala de Valoración de Alerta Temprana (EVAT) como herramienta clave para prevenir el deterioro y optimizar el cuidado integral de niños hospitalizados con cáncer en el país.
La doctora Díaz explicó que, la EVAT es un sistema de detección temprana con la que se evalúan los signos vitales y la condición física de los pacientes. Para ello, les asigna una puntuación que los clasifica mediante un código de colores: verde, amarillo y rojo, con el objetivo de identificar de manera oportuna los signos de alarma que pudieran derivar en complicaciones o incluso en la muerte del paciente.
“Estamos abocados en la ciencia, en investigar y recurrir a fármacos para curar las enfermedades; sin embargo, pueden pasar hasta 17 años antes de que estos resultados sean aprobados y transferidos a la práctica” señaló Díaz.
Desde 2017, basándose en estudios sobre el impacto de la aplicación de esta escala en la salud de los pacientes, un equipo de profesionales de la salud del INEN, liderado por la doctora Díaz, en colaboración con expertos internacionales, inició la implementación de la escala en pacientes oncológicos pediátricos. Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo de mejora de la calidad entre hospitales, que brindan atención oncológica infantil.
La doctora Rosdali Díaz, especialista en oncología pediátrica, explicó que el uso de la EVAT no solo mejora la calidad de los servicios de salud, sino que también aumenta su eficacia y fortalece la atención dentro del sistema. “Antes de implementar la escala en pacientes oncológicos en América Latina, se identificaron 553 casos de deterioro clínico, de los cuales 159 (29 %) fallecieron. Tras la aplicación de la escala, la tasa de mortalidad por eventos de deterioro clínico se redujo al 18 %.
Además, detalla la especialista, “no se observó un aumento en el uso de recursos de UCI, lo cual era una preocupación para los centros de salud”.
En América Latina, el proyecto EVAT se ha aplicado en 32 hospitales con recursos limitados de Perú, Bolivia, Ecuador, Colombia, entre otros países.
El apoyo de los padres en el proceso de recuperación
Finalmente, la ponente destacó la importancia del apoyo de los padres en la recuperación de los niños, especialmente en las salas de hospitalización y las unidades de cuidados intensivos. “Con una mayor presencia de los padres, podemos reducir el delirio en los pacientes, disminuir el uso de sedantes, aliviar el estrés y aumentar la satisfacción de los progenitores. Además, esto mejora el estado de ánimo de los pacientes y de la familia en general”, afirmó la doctora Díaz.
El evento contó con la participación de alumnos, docentes y autoridades de la Facultad de Medicina Humana de la UDEP, quienes destacaron el arduo trabajo y la dedicación del equipo médico en la implementación de la EVAT; así como su impacto positivo en la mejora de los resultados clínicos de los pacientes oncológicos pediátricos.