El profesor Alberto Requena pronunció el discurso “Miguel Grau: la virtud de la valentía como patrimonio cultural de los peruanos” en la sesión por el 145 aniversario del Combate de Angamos, en la Municipalidad de Piura.
Por Dirección de Comunicación. 09 octubre, 2024.En su discurso, Alberto Requena, profesor de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Piura, resaltó la necesidad de reflexionar sobre el valor de la valentía, uno de los valores predominantes de Miguel Grau, en la vida cotidiana de los ciudadanos.
La sesión solemne, realizada el 7 de octubre, en el marco del 203 aniversario de creación de la Marina de Guerra del Perú y del 145 aniversario del glorioso Combate de Angamos, se llevó a cabo en el salón de actos Miguel Grau de la Municipalidad de Piura.
Un ejemplo de virtudes
En el discurso de orden, “Miguel Grau: la virtud de la valentía como patrimonio cultural de los peruanos”, el profesor Requena destacó: “El legado de Miguel María Grau Seminario yace en un intangible; es decir, en una virtud humana. El Caballero de los Mares es patrimonio cultural de los peruanos porque es ejemplar”, anoto.
Asimismo, se refirió a la valentía del héroe piurano: “Don Miguel Grau encarnó la figura de una persona genuinamente valiente que no espera el aplauso o el reconocimiento social. Alguien valiente ni siquiera sabe cómo saldrá de la situación en la que se ha metido (…) es aquella que se entiende como un don para los demás. Ve su sacrificio como un deber moral, lejos de los reflectores y las loas.”
Por otro lado, el profesor de la UDEP instó a mejorar la visión que tiene una persona de los demás y a superar algunos problemas. Debemos evitar el hacer del “piensa mal y acertarás” una regla para entender al otro. “Necesitamos acostumbrarnos a hablar bien del otro (sin mentir claro está). Debemos recobrar la aceptación de la palabra ejemplaridad. No hay que esconder debajo de las piedras lo que es correcto y bueno para los demás. Al contrario, hay que destacarlo y promoverlo”, sostuvo.
Finalmente, ante la pregunta ¿se puede obligar a alguien a ser bueno?, el profesor Requena contestó con un rotundo no. Sin embargo, señaló que no será necesario obligar a nadie a ser bueno, “cuando tengamos a más personas que irradien confianza, valentía y amor; es decir, cuando tengamos a más personas como don Miguel Grau viviendo entre nosotros”.