David Espinoza, Dante Wong, Alan Patroni y Mónica Ríos abordaron cómo la filosofía ha impactado en la vida profesional y personal y cómo han encontrado en ella el sentido del hombre.
Por Betsy Salazar Guerrero. 20 noviembre, 2024.En el marco de los 30 años de la Especialidad de Filosofía de la Facultad de Humanidades, en Campus Piura se realizó un Café Filosófico en la Biblioteca Central, bajo el título “Más allá de lo útil: desde la profesión hacia la filosofía”, que reunió a docentes de la especialidad para reflexionar sobre el vínculo entre la filosofía y las diversas áreas del quehacer humano. El evento estuvo moderado por el doctor Fernando Riofrío.
El profesor David Espinoza presentó “Tejer lo múltiple: decidir para unificar”, en la que abordó la paradoja entre unidad y multiplicidad, y propuso que la verdadera unidad se logra a través de decisiones que integran la libertad propia y ajena, porque cuanto mayor sea la capacidad del hombre para tomar decisiones que unifiquen, mayor será su realización como ser humano. En ese sentido, “la mejor decisión que podemos tomar en nuestras vidas es poner nuestra libertad al servicio del otro”.
Por su parte, el magíster Dante Wong, expuso “La defensa de la injusticia y su oposición socrática”, con un enfoque crítico y provocador sobre los dilemas éticos en la justicia, mostrando, en última instancia, cómo la injusticia es indefendible. El profesor Alan Patroni reflexionó sobre “El amor en la filosofía de Platón y Lewis”. En la ponencia resaltó la centralidad de este tema en la búsqueda de significado del ser humano, y su realización a través de los conceptos de deseo y amor.
Finalmente, la doctora Mónica Ríos, directora de la Biblioteca y profesora del departamento, cerró el evento con “Eudaimonía: la felicidad en la mirada aristotélica”. En su participación destacó cómo Aristóteles ofrece claves para entender la felicidad en el contexto contemporáneo. La verdadera felicidad, indicó, surge de la virtud, el justo medio entre el exceso y el defecto; por ello, la persona que vive conforme a ella es más feliz en un sentido de plenitud. De este modo, “la eudaimonía aristotélica es mucho más que placer, es un concepto vinculado directamente a la autorrealización”.
El Café Filosófico no solo ofreció un espacio para el diálogo interdisciplinar, sino que también permitió a los asistentes reflexionar sobre cómo la filosofía trasciende lo puramente utilitario, proporcionando herramientas esenciales para la vida profesional y personal.