El contexto es distinto para las organizaciones políticas que tendrán que resolver sus campañas de manera creativa y, también, para los entes electorales que tomarán decisiones trascendentales en pro de la salud de los peruanos.
Por Hayrond Córdova. 15 septiembre, 2020.El 11 de abril parece una fecha lejana para muchos peruanos (el último padrón registra 25 287 954 votantes), pero no lo es para las organizaciones políticas y el sistema electoral. El tiempo corre y aquellos que pretendan participar en el proceso o tengan la obligación de hacerlo lo saben.
Lo que quizá no sepan muchos de los postulantes es cómo resolver su campaña electoral con las nuevas reglas que se vienen promulgando en el marco de las elecciones generales y la pandemia generada por la COVID-19. Del mismo, modo los organismos comiciales se encuentran en un momento complejo que requiere de decisiones serias.
Los flamantes nuevos jefes de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), Piero Corvetto y Carmen Velarde, respectivamente, recibieron sus cargos hace pocos días. Sin embargo, no tardaron mucho en empezar a tomar decisiones de cara al proceso que está en marcha. Ambos, sobre todo el primero debido a su implicancia en la realización de la elección, iniciaron sus labores de manera rauda.
El viernes pasado, se reunieron los representantes de los tres entes electorales: JNE, ONPE y Reniec. Propusieron que las elecciones internas de las organizaciones políticas, uno de los primeros actos del cronograma electoral, se realicen entre el 19 y 27 de diciembre próximo, a fin de que se elija a los candidatos para las generales.
A la fecha, el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) del JNE muestra un total de 24 agrupaciones políticas, las cuales podrían participar en los comicios de abril y realizar sus internas a fin de año. Para Rolando Luque, defensor adjunto para la Prevención de la Conflictos Sociales y la Gobernabilidad de la Defensoría del Pueblo, la cantidad de organizaciones inscritas representa un problema porque atomiza el voto en una elección.
De acuerdo con lo establecido en la normativa electoral, en las elecciones internas, el Reniec se encargará de la elaboración del padrón; la ONPE de la realización del proceso; y el JNE del cronograma respectivo, la fiscalización y de la resolución de conflictos en sede jurisdiccional.
Nuevo problema, nuevas normas
Debido a la pandemia generada por el nuevo coronavirus, la elección se realizará de 7 de la mañana a 7 de la noche. Es decir, las mesas de sufragio se instalarán antes de que inicie la elección y, en el caso de que ya hubieran votado todos los electores de la mesa, se podrá cerrar antes de la hora indicada y continuar con el conteo. Además, se propone un horario escalonado de votación.
La sullanera Marifé Córdova (23), estudiante universitaria, indicó que preferiría no ir a votar y cuidar su salud frente a un posible contagio del SARS-COV2. Al respecto, el constitucionalista Luis Castillo, profesor de Derecho de la UDEP, indicó que para que un deber jurídico sea válido debe ser razonable: “El deber de ir a sufragar no puede ser cumplido al margen de las circunstancias, sería irrazonable”. El especialista indica que, si no se resguarda la salud de los votantes con medidas sanitarias adecuadas, no existe el deber jurídico de ir a votar, “sería una extralimitación de tal deber”.
En tanto, Vladimir Bustinza, docente de la Facultad de Medicina Humana de la Universidad de Piura, sostiene que el voto, en el contexto de la COVID-19, debería ser opcional: “En algunos países, sufragar no es obligatorio para toda la población, eso debería ponerse en discusión en el entorno político actual, con el fin de resguardar la salud de la población”.
Indicó que, en el caso de que el ciudadano decida ir a sufragar, debe tener en cuenta los protocolos sanitarios establecidos hasta el momento (uso de mascarilla y protector facial, distancia social, lavado de manos con jabón y/o el uso de alcohol) y las medidas que propongan las entidades correspondientes de cara a las elecciones generales.
Otra de las normas que se establecen es que los ciudadanos que pertenezcan a grupos de riesgo para COVID-19 estarán exentos del pago de la multa por omisión al sufragio o no cumplir con la responsabilidad de ser miembro de mesa. El JNE habilitará una plataforma virtual para el trámite de justificación o dispensa y la ONPE debe hacer lo propio en relación al trámite de excusas para ser miembro de mesa.
El pago a los miembros de mesa
Una de las medidas más comentadas, desde la toma de mando del nuevo jefe de la ONPE, es la asignación de un pago de 120 soles, a los miembros de mesa. Al respecto, el presidente del JNE, Víctor Ticona, planteó que reciban una asignación económica equivalente al 2% de una UIT, es decir, 86 soles. Aún no es claro el monto que se les entregará a aquellos ciudadanos que se encargarán del desarrollo del sufragio, el recuento y el escrutinio de votos.
Corvetto manifestó que seguirán la propuesta de una mesa de votación por aula. Lo cual hace mucho más complejo el escenario para los votantes, ya que cabe la posibilidad de que el lugar de sufragio sea distinto al último utilizado en las pasadas elecciones. “Se usarán locales de votación nunca antes empleados, entre ellos, parques, estacionamientos, estadios y coliseos, como medida frente al coronavirus. Tenemos que garantizar la salud de todos los peruanos”, refirió.
En este contexto, hay que tener en cuenta la teoría de colas que plantea Willy Ugaz, director del programa de Ingeniería en Campus Lima de la UDEP, “Se pueden adicionar otros ambientes y, con esto, los costos se incrementarían; sin embargo, hay que buscar un equilibrio: no generar muchas colas, porque incrementan los costos, y habría que aumentar, lo suficiente, las estaciones de servicios (centros o locales de votación). “Hay que tener en cuenta los bloques horarios donde se acumula más gente y mejorar el proceso de atención, cumpliendo con los tiempos establecidos para el voto”.
El magíster y economista Germán Vega, doctorando de la Universidad de Columbia Británica y docente UDEP, considera adecuado que se asigne el presupuesto requerido por la ONPE (más de 500 millones de soles), con el objetivo de llevar a cabo, con todas las medidas preventivas del caso, la votación del 2021: “La participación ciudadana en las elecciones es fundamental para mantener la estabilidad institucional en el Perú. La única forma de atender el problema es darles seguridad a los sufragistas”.
Una de las recientes propuestas del JNE es que la inscripción de las listas de candidatos, en el marco de las elecciones generales se produzca el 11 de enero ante los Jurados Electorales Especiales, de manera que todo vaya quedando listo para este proceso.
Los futuros candidatos
El doctor en Comunicación Pública de la Universidad de Piura, Fernando Huamán, proyecta que la discusión que dominará durante estas elecciones será: la salud pública y la recuperación económica. “Independientemente de la orientación del partido, este sería el tema en el cual se deberán centrar las propuestas de los candidatos. El discurso político tendrá poco fondo y mucha más discusión de problemas concretos”, subrayó.