Cuando se necesita de un financiamiento, sea este para fines empresariales o personales, al solicitarlos, deben tenerse en cuenta los siguientes criterios, aunque no necesariamente en el orden que se menciona:
Por Jorge Gallo. 26 febrero, 2021.Primer criterio, el costo del financiamiento, expresado por la tasa efectiva anual (TEA) y su costo real, lo que la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) denomina la TCEA.
Segundo criterio, la liquidez; es decir, hay que considerar que el crédito que se solicita cubra las expectativas de dinero requeridas. Además, debemos asegurarnos de que los pagos previstos se adecuen al flujo de ingresos y gastos de la persona o el negocio, para no caer en el incumplimiento de los pagos pactados. Si alguien tiene un ingreso fijo, le conviene un cronograma de pagos con cuotas iguales. Pero, si tiene un ingreso variable, le conviene un cronograma de pagos en el que las cuotas se ajusten a su perfil de ingresos. Lo anterior aplica tanto para las personas como para las empresas.
Tercer criterio, la disponibilidad. Existen situaciones en las que no se pueden tomar decisiones en base a la conveniencia de una u otra alternativa, sino que se debe escoger aquella que esté disponible para cubrir la necesidad apremiante que necesita cubrir. Entonces, se debe elegir entre préstamos bancarios, proveedores u otros.
Cuarto criterio, la rapidez en la aprobación del préstamo o disponibilidad de los productos o servicios a financiar. Muchas veces, este es el criterio que prima sobre los anteriores cuando existe una real urgencia de obtener el dinero, productos o servicios.
Quinto criterio, las garantías y otros requisitos o documentos solicitados.
Revisemos y tengamos en cuenta estos criterios para evitar futuros inconvenientes.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.