¿Qué esl proyecto Amigos por Bolívar?

Por Diana Aguirre Manrique. 06 noviembre, 2012.

En 1998 nació en Colombia el proyecto Amigos por Bolívar, gracias a la iniciativa de Diana Torres y Clara Inés Sánchez basada en algunas experiencias en las que habían participado, tales como: “La quinta de mi amigo Bolívar” y “La huerta de mi amigo Bolívar”. El proyecto buscaba mostrar a los niños la riqueza de sus museos de una manera diferente, tomando como eje la figura de Simón Bolívar. Con el apoyo de Daniel Castro, director del Museo Casa Quinta Bolívar, del Convenio Andrés Bello y de otras instituciones se dio vida a un proyecto binacional.

Hace un año tuve la oportunidad de viajar a Colombia. Hablé con Clarita Inés y, por supuesto, conocí la Casa Quinta Bolívar, que ansiaba recorrer.  Además, leí las Memorias del proyecto y, desde ese momento surgió la iniciativa de recordar a los piuranos el valor de esa propuesta porque, como dicen las autoras, este proyecto es una experiencia para repetir.

Para que los estudiantes aprecien y reconozcan sus orígenes y cultura, y se sientan orgullosos de lo que son, Clara Inés propone la exploración de la historia de Colombia tomando la vida de Simón Bolívar, en lo que ella denominó la Cátedra Bolivariana. El primer acercamiento de los alumnos con “El Libertador” se da a través de una carta de invitación personal que llega a los niños, firmada por Bolívar y desde ese momento, la Casa Quinta se convierte en un nuevo espacio donde los alumnos construyen el conocimiento histórico. Esta iniciativa mereció la nominación del Premio Compartir al Maestro, de Colombia.

De Bogotá a Piura

El 2001, el Proyecto Amigos por Bolívar y Grau  dio sus primeros pasos, con apoyo de Luis Repetto Málaga, en Lima;  y el entusiasmo de Luis Chaparro, en Piura. Se eligió a nuestra Región porque en Paita descansan los restos de Manuela Sáenz y Simón Rodríguez, personajes que ejercieron gran influencia en la vida del Libertador. Pero, principalmente, se enlazó con nuestro héroe Miguel Grau, el símbolo máximo de identidad y patriotismo, y coincidentemente, hijo de colombiano.

Esta iniciativa fue acogida por quince colegios piuranos: San José de Tarbes, Magdalena Seminario de Llirod, Santa Mónica, Turicará, Hogar San Antonio, Rosa Carrera de Martos, La Cantuta,  Jorge Basadre, Hans Christian Andersen, San Pedro, Santa Ana, Vallesol, La Sendita , Padre José Safarik y Simón Rodríguez.

Así comenzó la I fase de la aventura: Tengo un amigo. Consistió en el intercambio de correspondencia entre los niños de ambos países, en las que los participantes compartían su  historia, sus costumbres y sus impresiones sobre la experiencia en las diversas actividades en las que participaban: cuenta cuentos, teatro, danza, visita a museos, etc.

Se generó la formación del taller de teatro “Tren de Ilusión”, la sala de lectura, los talleres de manualidades, un grupo coral, etc., dirigidos por diversos profesionales. Todas estas actividades se realizaban en el ex Centro Cultural de Piura (Plazuela Merino).  ¡Qué entusiasmo y expectativa tenían los niños de recibir y escribir esas cartas! Gracias al proyecto, el viejo inmueble rejuvenecía cada vez que los niños, que asistían ilusionados a sus talleres, recorrían sus espacios.

El proyecto permitió  iniciar el proceso de integración de los niños de Colombia y Perú. En mérito a ello, el 30 de mayo de 2003, por Resolución Directoral No.384/INC se le declara de interés cultural. Un mes después, los artífices colombianos Diana, Clarita, Daniel y Juan nos visitaron y se llevaron un recuerdo imborrable de Piura. Recorrieron cada colegio, participaron de veladas culturales, realizaron talleres de lectura con profesores y alumnos del proyecto.

La herencia del 2001

Fue en noviembre de 2001, hace exactamente 11 años, cuando el proyecto se consolidó, por lo que es propicio traer a la memoria estos recuerdos. Uno de los vestigios más representativos son los cientos de libros que conformaron la Biblioteca Bolivariana, equipada con ejemplares, algunos de ellos únicos, donados por instituciones colombianas y que hoy –lamentablemente– se encuentran abandonados en uno de los ambientes del excolegio San Miguel.

Esta biblioteca y el Chasqui Bolivariano incentivaron la lectura en Piura durante los 4 años del proyecto. En estos momentos, cuando el excentro cultural ha sido traspasado al Gobierno Regional para su puesta en valor,  invocamos a las autoridades y a la sociedad civil para que se comprometan a asegurar un traslado digno de este fondo bibliográfico.

Pero, además, en el contexto actual de la celebración del Bicentenario de la Independencia del Perú,  las instituciones culturales y educativas competentes, podrían retomar las líneas maestras de este proyecto y generar nuevamente la integración en base a un tema central: la influencia de Bolívar en la consolidación de la Independencia. Se puede propiciar  que niños y jóvenes de ambas naciones  intercambien experiencias, ideas y expectativas en torno a estos grandes valores que se forjaron en la consolidación de nuestras independencias. Según palabras de Clara Inés Sánchez: Este Proyecto responde, al desafío… de la formación de una cultura para la Paz y la Integración a través de la enseñanza de la Historia. Rescatando una educación donde se resalten los valores de “solidaridad, respeto mutuo, diálogo, concertación”.

Llegó mi amigo

La segunda fase del proyecto se denominó Llegó mi amigo. Consistía en la visita de una delegación de participantes colombianos a Piura y viceversa. Esta fase no la realizaron todos los participantes del Proyecto; sin embargo, quedará en el recuerdo el imborrable paso de las figuras de Bolívar y Grau en el corazón de los participantes. Ahora, todos tenemos la oportunidad de ser agradecidos con esta iniciativa que tanto hizo por la cultura piurana, defendiendo la recuperación de la biblioteca. De esta manera, demostraremos que tanto la lectura como la cultura sí importan a los piuranos.