Hoy, hablamos de una nueva normalidad en la que la innovación y el emprendimiento se han convertido en factores clave para el éxito empresarial en un mundo cada vez más globalizado y competitivo.
Por David Morán. 27 marzo, 2023. Publicado en El Peruano, el 25 de marzo de 2023.Durante la pandemia, fuimos testigos del proceso acelerado de transformación digital que tuvieron las empresas. Hoy, hablamos de una nueva normalidad en la que la innovación y el emprendimiento se han convertido en factores clave para el éxito empresarial en un mundo cada vez más globalizado y competitivo. El 2023, se presenta como un año de grandes desafíos y oportunidades para las empresas que buscan destacarse en un mercado en constante evolución. En este sentido, hay varias tendencias que podrían definir el rumbo del futuro cercano, que mencionaremos a continuación.
Adopción de la inteligencia artificial. Sistemas como ChatGPT y DALL-E 2 han marcado la pauta para una adopción real de la Inteligencia Artificial (IA), sobre todo a través de softwares con interfaces sencillas que permitan que las empresas puedan aplicarlas a sus propias necesidades de una manera rápida. Hoy, podemos ver soluciones de IA en diversas verticales como la generación automática de contenido, optimización de procesos, logística, entre otras. De acuerdo con un informe de McKinsey & Company, el 50% de las organizaciones a nivel mundial utiliza aplicaciones que incorporan IA, este porcentaje es más del doble del de hace cinco años, que se situaba en un 20%.
Crear soluciones tecnológicas sin usar código. Hablar de rapidez es también hablar de “No-Code”, el cual, en palabras sencillas, es usar herramientas de terceros para crear soluciones tecnológicas. Esta filosofía permite a cualquier persona u organización acceder a la creación de aplicaciones y softwares sin usar código. Por ejemplo, si se quiere montar un ecommerce, en lugar de programar la tienda desde cero se podría usar Shopify o TiendaDA. Así mismo, hay muchos procesos en las empresas en los que se pueden usar herramientas No-Code para generar soluciones más rápidamente y con menor inversión. De acuerdo con un estudio de Forrester, el 84% de las empresas ya usa alguna de estas herramientas para reducir costes y acelerar su crecimiento.
Economía creativa. La posibilidad de que un usuario pueda aprovechar las diferentes plataformas existentes para crear valor ha dado paso a la “Creator Economy”. Según un estudio de HubSpot, este mercado tiene un tamaño de más de 104 000 millones de dólares, más del doble del valor que tuvo el 2019. Esto hace evidente que hay más creadores generando ingresos, más sponsors y más marcas. Uno de los principales cambios en este espacio es la accesibilidad, debido a que las barreras para crear productos digitales para medios se han reducido significativamente, al punto de que un creador puede producir algo directamente desde su teléfono y publicarlo en las redes sociales.
Realidad virtual/aumentada y metaverso. En los últimos años, tecnologías como la realidad virtual, la realidad aumentada y la realidad mixta han abordado el mercado de consumo, introduciéndose en múltiples ámbitos de nuestra vida diaria. Estas experiencias virtuales, que podemos disfrutar en la actualidad, son precursoras del futuro metaverso. Sin embargo, ya nos permiten apreciar el potencial que este tiene, desde aplicaciones de marketing, creando experiencias gamificadas y memorables, hasta la simulación de procedimientos complejos en la industria minera. Según Grand View Research, se prevé que el mercado global del Metaverso crezca a una tasa compuesta anual del 39,4%. desde el 2022 hasta el 2030.
Sostenibilidad. La tecnología por sí sola no es suficiente para asegurar el éxito empresarial. También es importante que las empresas adopten prácticas empresariales sostenibles. La economía circular, en la cual los residuos son reutilizados como recursos, se presenta como una estrategia importante para reducir el impacto ambiental de las empresas. Si estas tienen un propósito claro, más allá de sólo obtener ganancias, serán cada vez más atractivas para los consumidores y los empleados. Los primeros buscan productos y servicios que aborden problemas sociales o ambientales; y los empleados, trabajar para empresas que compartan sus valores.
Este año, la adopción de tecnologías emergentes y prácticas empresariales sostenibles son solo algunas de las tendencias que podrían definir el rumbo de la innovación y el emprendimiento. Las empresas que logren adaptarse y puedan aprovechar estas tendencias tendrán una ventaja competitiva en un mercado cada vez más complejo y exigente.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.