La Cumbre Internacional de Innovación y Emprendimiento (CiE) inauguró su sexta edición en Piura. En su primer día, se destacó la importancia de articular los actores públicos y privados para proponer políticas públicas sobre innovación regional.
Por Manuel Camacho-Navarro. 02 octubre, 2024.El doctor Paul Corcuera, rector de la Universidad de Piura, dio la bienvenida a la VI Cumbre de Innovación y Emprendimiento que organiza el Centro de Innovación y Emprendimiento HUB UDEP. Hizo un llamado a promover la innovación, el aprendizaje y la colaboración integral, así como al cultivo del conocimiento y alianzas estratégicas entre la academia, el sector privado y las instituciones.
En el primer panel de la CiE, expertos y funcionarios públicos del Ministerio de la Producción (Produce) y del Gobierno Regional de Piura ofrecieron una lectura institucional y social acerca de la aplicación de políticas públicas en Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) en las regiones.
De cara al reto que enfrenta la CTI en el Perú, Raúl Valdiviezo, director del Instituto Regional de Ciencia, Tecnología e Innovación (IRCTI) del Gobierno Regional de Piura, manifestó la necesidad de articular todas las instituciones que trabajen en base al sistema de CTI para impulsar un ecosistema de gestión de recursos y mejorar los resultados.
Esta falta de articulación fue reconocida por Vanesa Sánchez, directora de la Dirección General de Innovación, Tecnología, Digitalización y Formalización del Produce, quien señaló que la articulación no es solo una responsabilidad pública, sino también privada.
“La colaboración es abrir nuestro conocimiento, nuestras capacidades y poder compartirlas. Todos debemos mirar hacia un solo norte, sin dejar de reconocer que hay condiciones diferentes,” observó.
En este punto, el moderador del panel, Marcos Agurto, vicerrector de Investigación de la UDEP, resaltó la necesidad de una verdadera articulación entre todos los ministerios para que el Perú se convierta en un país promotor de la CTI.
“Si nos olvidamos de la base que es la educación, salud y productividad de sectores claves, poco se podrá hacer. La articulación también debe ser intersectorial,” subrayó.
En tanto, Sánchez marcó la interculturalidad como solución para impulsar la innovación en las regiones, identificando aquello que perjudica el progreso e incentivando la participación ciudadana.
“Hace falta reconocer las condiciones de un territorio, la idiosincrasia, la cultura. Identificar aquello que está perjudicando el progreso; e involucrar no solo a los jóvenes sino también a los adultos,” añadió.
En esta línea, Sánchez y Valdiviezo coincidieron en la necesidad de popularizar y democratizar la CTI a los públicos. “Debemos tener referentes que sean personas vinculadas a las CTI. Democratizarla en las municipalidades, en los gobiernos locales. Que no se hable solo CTI en las entidades académicas, sino que también lo hagan los jóvenes,” propuso el director del IRCTI.
Sin embargo, para Freddy Hilacondo, director de la coordinación técnica de ProInnóvate, estos avances e iniciativas solo son posibles en la medida en que los actores coincidan en un objetivo común: una región más competitiva. “Es una cuestión de voluntad y dejar los egos de un lado, sentarse en una mesa a conversar sobre qué es lo mejor para la región, qué es lo que necesita.”
Finalmente, el doctor Agurto concluyó el panel señalando que estos mecanismos permiten que diferentes actores conozcan sus problemas y generen colaboración. “La innovación no solo la hace el gobierno regional, no solo el sector privado, las universidades. La innovación se produce cuando todos colaboramos. Especialmente cuando trabajamos teniendo en cuenta el desarrollo de nuestra región,” enfatizó.