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2011

Las duras pruebas siempre dan lugar a valiosas enseñanzas y ejemplos para las futuras generaciones. La opinión del presidente francés, Nicolás Sarkosy, luego de su reunión con Ángela Merkel, (primer ministro alemán) sobre la emisión de los eurobonos fueron las siguientes: “podrían ser una solución al final del camino hacia la integración europea”. Nos damos […]

Por Carlos Hakansson. 05 septiembre, 2011.

Las duras pruebas siempre dan lugar a valiosas enseñanzas y ejemplos para las futuras generaciones. La opinión del presidente francés, Nicolás Sarkosy, luego de su reunión con Ángela Merkel, (primer ministro alemán) sobre la emisión de los eurobonos fueron las siguientes: “podrían ser una solución al final del camino hacia la integración europea”. Nos damos cuenta de que, a pesar de una severa crisis económica, siempre se pueden obtener lecturas positivas. La emisión de los eurobonos, que equivaldría a la deuda conjunta de los países de la zona euro, poco a poco viene ganando terrero; no se encontraba en la agenda de sus principales líderes, pero ahora se vislumbra como uno de los instrumentos para empezar a resolver las consecuencias que viene teniendo la crisis en las economías de moneda única.

Los principios de solidaridad y reciprocidad son los llamados a participar en la solución del problema. El principio de solidaridad, para integrar a una resistente Alemania a emitir los eurobonos. Si bien la Comisión Europea sostiene la necesidad de crearlos, incluso al margen de Alemania, en la práctica se trataría de una estrategia de presión que carece de sustento político y económico. El principio de reciprocidad, porque la creación de los eurobonos llevará consigo el control de las cuentas de todos los países participantes de su emisión y, en consecuencia, una vigilancia constante para que se lleven a cabo las reformas necesarias. Desde el constitucionalismo, menos soberanía estatal.

El lanzamiento de bonos sin el respaldo alemán empeorará la crisis, por la inminente competencia entre el bund alemán y el resto de la zona del euro. Nuevamente la Locomotora alemana es indispensable para el nacimiento, subsistencia y éxito del eurobono. Las resistencias de Ángela Merkel a su emisión son explicables, su reelección dependerá solamente de los votos alemanes y no de la voluntad del resto de ciudadanos europeos.

La oposición política alemana guarda expectante la decisión del ejecutivo y, a no dudar, la emisión conjunta de los eurobonos será muy criticada con miras a las próximas elecciones. El sobrecosto por la subida de los intereses que supone la deuda conjunta para el Tesoro alemán ascendería a 47 000 millones de euros. Por eso, en estos momentos es necesario que los gobernantes se encuentren a la altura de las circunstancias y que sepan armonizar la política doméstica con la del conjunto.

Docente.

Facultad de Derecho.

Universidad de Piura.

Artículo publicado en el diario Correo, martes 30 de agosto de 2011.

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