Por Axel Meisen
Por Julio Talledo. 23 abril, 2012.RESUMEN: Se identifican los principales factores que dan forma al futuro del mundo, junto con sus interacciones y sus posibles consecuencias, que representan futuros muy diferentes si se analizan desde la perspectiva del Perú. Estas consideraciones proporcionan una base de comprensión para desarrollar estrategias proactivas por parte de los peruanos y sus organizaciones, incluyendo a la Universidad de Piura, sus profesores y alumnos, sus graduados, recién ingresantes y amigos en general. Las estrategias deben garantizar el bien de la persona y la paz social así como la competitividad global y el éxito económico del conjunto.
Este es un día muy especial para todos. Deseo expresar mis sinceras felicitaciones sobre todo a los estudiantes que han completado los exigentes programas de la Universidad de Piura y están recibiendo sus títulos hoy. Ustedes han trabajado duro y han vencido muchos retos académicos y personales. Lo más importante es que demostraron una gran disciplina para ver culminados sus estudios. Ahora tienen la experiencia que les permitirá construir un buen futuro para sí mismos, sus familias, sus comunidades y su país. Voy a decir más sobre el futuro más adelante pero antes me quiero detener en esta idea.
Sin el apoyo de sus familias, especialmente sus madres, sus padres, en algunos casos sus esposas o esposos, y por supuesto sin la ayuda de sus amigos, muy probablemente nuestros egresados no habrían podido lograr unos estudios exitosos. Por lo tanto, también deseo expresar mi agradecimiento y felicitación a ellos también. Ustedes pueden legítimamente compartir la satisfacción y la alegría de nuestros graduados.
Claramente, el éxito de nuestros graduados no hubiera sido posible sin el conocimiento y la dedicación de los docentes de la Universidad de Piura. A su vez, los docentes no podían hacer su trabajo sin la dedicación y apoyo del personal administrativo de la Universidad. Todos ellos merecen nuestras felicitaciones. Espero que nuestros graduados expresen su agradecimiento, no sólo en este acto social, en esta ceremonia, sino también manteniendo el contacto con ellos en el futuro. Animo a nuestros graduados a compartir con ellos sus experiencias y, lo más importante, sus aportes en la aplicación de los conocimientos que adquirieron durante sus estudios en la Universidad de Piura.
Si bien que todas las personas que he mencionado han sido esenciales para el éxito de nuestros graduados, sus esfuerzos hubiesen quedado desprovistos del éxito si no hubiesen trabajado juntos. En particular, los profesores y el personal de la Universidad de Piura, quienes colaboraron en el diseño y ejecución de los programas académicos. También proporcionaron supervisión y apoyo emocional cuando fue necesario. Más recientemente, aportaron buenos consejos a nuestros graduados en la construcción de sus carreras y vidas futuras.
Esta colaboración, en un alto nivel de calidad académica, es una de las características esenciales de una gran universidad. Otra característica esencial es el papel central de los valores humanos y espirituales. La Universidad de Piura es afortunada que tales valores estén presentes en todas sus actividades.
Quiero ilustrar esto hablando brevemente acerca de mi experiencia personal con la Universidad de Piura.
A pesar de haber visitado el Perú antes, la primera vez que tuve conocimiento de la Universidad de Piura fue en la década de los 80 cuando uno de sus grandes amigos y simpatizantes, el ingeniero Fernando Lira, se contactó conmigo para solicitar ayuda con el desarrollo de los laboratorios de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Civil en Piura. En ese momento, yo era profesor y decano asociado de la Universidad de British Columbia en Vancouver, Canadá. Le dije al ingeniero Lira que mi capacidad de ayudar con el tema de laboratorios era limitada. Sin embargo, yo estaba muy interesado en el compromiso de la Universidad de Piura en la formación del “ingeniero completo”. La idea del “ingeniero completo” significa una persona que no es sólo un experto técnico competente, sino que también posee los valores humanos y la motivación para aplicar su experiencia para garantizar beneficios a largo plazo en la sociedad.
El ingeniero Lira me invitó al Campus de la Universidad de Piura y me presentó a sus colegas. En ese momento, el campus era un gran trozo de desierto, con sólo unos pocos edificios, en las afueras de la ciudad. Su rector, el Dr. Víctor Morales, y su joven personal (entre ellos el Dr. Antonio Mabres, que posteriormente se convirtió en rector) habló con entusiasmo sobre la construcción de una universidad para atender las necesidades de la región y su gente. También habló acerca de cómo convertir el desierto del Campus en un bosque frondoso repoblando los médanos con los árboles nativos de Algarrobo (Prosopis pálida).
Se tenía previsto cultivar los árboles por riego por goteo durante muchos años, hasta que las raíces de los árboles de algarrobo alcanzasen el agua subterránea profunda. Luego no se requeriría ningún otro tipo de riego desde arriba. Este enfoque para convertir el desierto era nuevo, requería imaginación, persistencia, y una visión clara del futuro.
Vi la conversión del desierto como una buena metáfora para la construcción de una gran universidad y la educación de sus estudiantes. Se trataba de personas con las que quería trabajar. Yo también deseaba compartir sus valores y enfoques con mis colegas en la Universidad de la Columbia Británica y en todo Canadá.
En la década de 1980, una pregunta básica para los miembros de la Universidad de Piura y para mí fue: ¿es posible construir una universidad regional, en conformidad con los principios y las características enunciadas? En ese momento, el Perú estaba en medio de la agitación política y social. La gente luchaba por vivir el día a día. Los fundadores de la Universidad, los primeros profesores, los promotores y el personal tuvieron un momento muy difícil.
Sin embargo, perseveraron y tuvieron éxito.
En la actualidad, el Campus Piura es un verdadero bosque, con imponentes árboles de algarrobo, y hasta venados, ardillas y pavos reales. Hay muchos edificios académicos, todos se mantienen en excelentes condiciones y funcionan bien. Hubo muchas personas que ayudaron a lograr el éxito, incluido el apoyo local, como el del ingeniero Doig.
La Agencia Canadiense de Desarrollo Internacional también prestó apoyo financiero a la Universidad de Piura durante aproximadamente 15 años. Se utilizó este apoyo para ampliar y desarrollar nuevos programas académicos, no sólo para los estudiantes sino también para profesionales en ejercicio. Hemos ayudado a la Universidad de Piura a introducir la educación cooperativa en el Perú, una forma de enseñanza que ofrece a los estudiantes experiencia práctica de trabajo como parte integrante de sus estudios académicos. Se prepara a los estudiantes no sólo para su vida profesional posterior, sino que también fortalece la relación entre la Universidad y sus comunidades externas.
Hoy en día, vemos el éxito de la Universidad de Piura, tanto en su Campus de Piura como en el de Lima. Podríamos enfocarnos en los edificios y los programas, pero no podemos olvidar que estos son el resultado de la dedicación, el compromiso y los valores de las numerosas personas que ayudaron a crear la Universidad. El apoyo y la guía espiritual del Opus Dei eran esenciales. Estos fueron proporcionados generosa y respetuosamente, reconociendo la diversidad de la familia humana y la inviolabilidad de sus convicciones.
También estoy muy feliz de decir que las conexiones y amistades que se desarrollaron entre el personal docente y administrativo de la Universidad de Piura y sus contrapartes en Canadá son numerosas, profundas y de larga duración. Tengo el privilegio de ser uno de esos pares y es un gran placer para mí dirigirme a ustedes hoy en el Campus Lima.
Quería compartir con ustedes algunas de mis experiencias personales con la Universidad de Piura para que ustedes sepan que no soy un extraño para la Universidad. Sin embargo, y esto es lo más importante, quería que los nuevos estudiantes que ingresan a la Universidad de Piura este año conozcan lo especial que es su universidad. Su fundamento consiste no sólo en el rigor académico, buenos programas e instalaciones. Sus bases también incluyen los valores humanos y espirituales que presiden todos los aspectos de la vida de la Universidad.
Felicito a los nuevos estudiantes y sus familias por haber hecho una buena elección y les doy la bienvenida a la Universidad de Piura.
Es habitual que el orador, con ocasión del inicio del año académico, haga algunas observaciones especiales. Estas observaciones deben ir más allá de felicitaciones, bienvenidas y algo de historia. Estas observaciones son siempre un desafío, porque nuestros estudiantes quieren iniciar su vida social, desean comenzar su vida profesional o comenzar sus estudios.
Quiero enfrentar el reto, centrándome en un tema que, creo, tiene el mismo valor para nuestros graduados, nuestros nuevos estudiantes y la Universidad de Piura. Me refiero al “futuro” y, en particular, cómo podemos usar el futuro como una guía para las acciones que debemos tomar ahora. Por eso he titulado mi conferencia “El Futuro: Una guía para nuestras acciones en el presente”.
Antes de compartir mis pensamientos con ustedes, en esta ocasión tan especial, desearía primero dejar patente una salvedad. Las ideas que presento aquí son mías, desarrolladas durante muchos años de elaboración intelectual. Quiero decir que no representan las posturas ni las políticas de mi institución, Alberta Innovates – Technology Futures o las ideas del Gobierno de Alberta, su promotor y principal accionista. Asimismo, no representan las posiciones políticas de la Comisión Canadiense para la UNESCO o del Gobierno de Canadá, que financia la Comisión.
EL FUTURO: UNA GUÍA PARA NUESTRAS ACCIONES EN EL PRESENTE
Nuestros graduados, nuestros nuevos estudiantes y todos nosotros tenemos esperanza de vivir una vida larga y feliz. Por tanto, podemos preguntar “¿cómo será el mundo a mediados de siglo?” Seguro el mundo tendrá una fuerte influencia sobre la República del Perú, sobre sus regiones y ciudades, sus pueblos y barrios inclusive. Vivimos en un mundo cada vez más conectado y esto no va a cambiar.
Si conociéramos el estado en el que se encontrará el mundo en el año 2050, podríamos tomar medidas ahora para prepararnos para ese mundo del futuro. Podríamos dividir el tiempo entre ahora y el año 2050 en períodos más cortos, por ejemplo décadas, y pensar en las acciones que debemos tomar en cada década.
Este enfoque utiliza el futuro o, más específicamente, las características del futuro para guiar nuestras acciones ahora y en las próximas décadas.
Usted podría preguntarse por qué he elegido la mitad del siglo para hablar del futuro. La razón es que el año 2050 es una distancia suficiente como para cuestionar nuestras expectativas. No nos lo podemos imaginar con sólo prolongar o extraponer las tendencias actuales. Por otro lado, 2050 no es tan distante que no se pueda prever.
La dificultad de utilizar el futuro para guiar nuestras acciones es, por supuesto, lo impredecible del futuro. No hay ninguna “bola de cristal” que nos lo prediga.
Cabe recordar en este sentido las sabias palabras del Antiguo Testamento, en Proverbios 27,1: “No te jactes del Día de Mañana, porque no sabes qué traerá el día”.
Por lo tanto, no voy a tratar de predecir el futuro. No puedo adivinarlo. Sin embargo, lejos de tal pretensión, me gustaría sí identificar las principales fuerzas y factores que darán forma al futuro del mundo. Una vez reconocidas estas fuerzas y los factores que los motivan, podemos reflexionar acerca de sus interacciones y de las consecuencias que pueden derivarse. Como se verá en breve, como resultado del presente tendremos futuros muy diferentes. Nuestra tarea será ver qué acciones podemos tomar para asegurarnos de que haremos el bien para nuestras familias, comunidades, para nuestros países y el mundo en general. Quiero concluir mis comentarios sobre el futuro con algunas sugerencias de medidas a tomar.
Las fuerzas que moldean el futuro del mundo
Hay varias fuerzas que moldearán el futuro del mundo a largo plazo.
Estas incluyen el crecimiento de la población mundial. Según las estimaciones de las Naciones Unidas, la población mundial probablemente aumentará de aproximadamente 7 mil millones de personas a más de 9 mil millones a mediados de siglo. Además, la población del mundo envejecerá. Mientras que países como India y China tienen en la actualidad una población relativamente joven, esto ya no será así a la mitad del siglo. La razón es, por supuesto, una mayor esperanza de vida debido a la mejora de la atención médica.
¿Podemos estar absolutamente seguros de que la población mundial va a aumentar a mediados del siglo? No, no podemos estar absolutamente seguros, aunque importantes avances en la ciencia médica, sin duda, se produzcan. Hay dos razones por las que no podemos estar seguros. La primera razón es que puede haber una inesperada pandemia global que de lugar a un gran número de muertes. El VIH presenta el riesgo de ser una de esas pandemias. Parece haber sido evitado, pero hay muchas regiones (especialmente en África), donde la población sigue disminuyendo. La segunda razón es el pobre estilo de vida, especialmente de los jóvenes. Muchos fuman, no comen bien, no hacen ejercicio físico y duermen muy poco, privando a su cuerpo del descanso que necesita. Muchas enfermedades como la diabetes, los derrames cerebrales y los ataques cardíacos se pueden atribuir a un conjunto de malos hábitos que caracterizan nuestras sociedades modernas.
Si aumenta la población mundial, o incluso en caso de que se mantenga estable, pero con mayor prosperidad, se producirá sin duda una mayor demanda de alimentos y de recursos como energía, metales y otras materias primas, y –esto es muy importante– de agua. Gran parte de la energía del mundo proviene de carbono fósil en forma de carbón, petróleo y gas natural. ¿Habrá suficientes cantidades de estos tipos de energía, disponibles a un costo que satisfaga las necesidades del mundo?
La demanda de recursos es, por lo tanto, una segunda fuerza principal que dará forma al futuro del mundo.
La tercera fuerza principal se refiere a la producción industrial, transportes y uso de los recursos, que suelen ir acompañados por la generación de gases de efecto invernadero y otros contaminantes. En particular, el dióxido de carbono puede originar graves cambios climáticos. El hielo de la criósfera podría continuar derritiéndose y desaparecer. La criósfera incluye el hielo en forma de glaciares y la nieve en las altas montañas, el hielo marino en el Ártico y el Antártico, y el hielo en el suelo (también llamado permafrost). Si la atmósfera y la criósfera cambian, la temperatura de los océanos y las corrientes se van a ver drásticamente alteradas. Puede haber sequías e inundaciones en todo el mundo. El impacto en la producción de alimentos, el comercio y la vida cotidiana, serán muy importantes. Para una evaluación detallada de las cuestiones relativas al cambio climático, les remito a las publicaciones de las Naciones Unidas. El informe publicado recientemente, denominado 21 temas para el siglo 21 – Resultados del Proceso de previsión del PNUMA sobre cuestiones ambientales emergentes, es particularmente importante.
La cuarta mayor fuerza que afectará al desarrollo del futuro es la evolución del sistema financiero global. Este puede variar de ser un conjunto ordenado, abierto y funcional hacia devenir en un enredo desordenado, cerrado y disfuncional. Las actuales crisis financieras experimentadas en muchas regiones del mundo apoyan la opinión de que el sistema financiero mundial no es tan robusto y no asegura un avance continuo en la prosperidad y la calidad de vida en todo el mundo.
La quinta fuerza que debemos tomar en consideración es el avance de la ciencia y la tecnología. En particular, podemos esperar grandes y rápidos avances en la tecnología de la información y la acumulación de enormes cantidades de datos en forma digital. Sin embargo, la disponibilidad de la información y el conocimiento no garantiza su uso racional. El uso racional y ético de la información constituye un reto importante para el futuro.
La sexta y última fuerza que quiero mencionar es la gobernabilidad y la paz. A menudo, se supone que la gobernabilidad mundial va a mejorar y que la paz prevalecerá. Es cierto que se han creado sistemas de gobierno mundial que evitan o limitan la guerra entre las naciones. Sin embargo, resultados similares no se han logrado a nivel regional. Hay grandes conflictos regionales en África. En países como México, hay muchas comunidades afectadas por la delincuencia y los conflictos armados. Por lo tanto, no podemos suponer que para el año 2050, todas las regiones del mundo serán más seguras y mejores de lo que son hoy en día.
Sin duda, se puede pensar de otras fuerzas que afectarán el futuro del mundo. Sin embargo, las que mencioné son probablemente las más importantes.
Las fuerzas que moldean el futuro del Perú
Si las fuerzas de la población, la demanda y la disponibilidad de los recursos, el cambio climático, el estado del sistema financiero, los avances en ciencia y tecnología, y la forma de gobierno moldean el futuro del mundo, ¿qué significan para el Perú y por lo tanto, para sus vidas?
Dado que el Perú es parte de un mundo cada vez más interconectado y relacionado entre sí, el Perú estará sujeto a las mismas fuerzas globales que acabo de describir. Además, muchas de estas fuerzas globales tienen sus contrapartes en el Perú. Por ejemplo, el Perú tendrá que lidiar con una población cambiante, menos joven, y cada vez más numerosa. La economía del Perú depende en gran medida de los mercados de exportación para sus recursos, en particular minerales como los fosfatos, además de cobre, oro y otros metales, combustibles y alimentos. El cambio climático global, en caso de producirse, afectará profundamente al Perú. Las corrientes frías a lo largo de la costa del país pueden ser interrumpidas, la recurrencia e intensidad del fenómeno de El Niño y de La Niña pueden intensificarse y la productividad biológica del océano Pacífico puede caer debido al aumento de la acidez y la temperatura del agua.
Por otra parte, Perú no sólo será ya un receptor de nuevas tecnologías, sino que también puede convertirse en un generador de tecnologías de vanguardia. Si el Perú se posiciona de una determinada manera, puede aplicar los avances científicos y tecnológicos de otros lugares, e impulsar así sus exportaciones. Por último, y esto es muy importante, el estado de la gobernabilidad y la paz social en todo el país y entre sus diversas poblaciones darán forma al futuro del Perú y por lo tanto de sus vidas.
El Perú también tiene algunas características que no son predominantes en el mundo. Puedo nombrar sólo tres. La primera es el dominio de la capital, de Lima, en todos los aspectos de la vida del país; en muchos otros países, hay varias megaciudades que compiten entre sí. La segunda es la coexistencia de diversas culturas con fuertes aspiraciones de preservar su identidad, sus lenguas, costumbres y su entorno humano y natural. La tercera es la misma tierra del Perú, una tierra muy grande y muy rica. El territorio peruano no sólo es extraordinariamente rico en minerales, sino también los recursos biológicos como madera, pescado y productos agrícolas.
Las consecuencias de las fuerzas que moldean el futuro del mundo y del Perú
Si aceptamos que las fuerzas que configuran el mundo y el Perú para el 2050 son las que he descrito, podemos identificar las fuerzas que tienen mayor impacto y las que presentan mayor incertidumbre. Después de una cuidadosa consideración, es probable que éstas sean el estado del sistema financiero mundial y la evolución errática del clima. El sistema financiero puede variar de esta perturbación actual a un estado más funcional. El cambio climático puede variar de ser llevadero, gradual y previsible a convertirse en una crisis insuperable, brusca e impredecible. Esto no quiere decir que las otras cuatro fuerzas no sean importantes. Significa que todos estos factores están incorporados en los escenarios que resultan de las interacciones de las dos fuerzas principales: el estado del sistema financiero mundial y el cambio climático. Así pues, cuatro escenarios emergen.
El primero correspondería a una situación donde el cambio climático se acelera y se torna grave pero el sistema financiero mundial mantiene su consistencia. En estas condiciones, países como el Perú cuentan con abundantes recursos o pueden acceder a recursos de otros países para mitigar los impactos negativos del cambio climático. En el caso del Perú, es probable que la agricultura enfrente grandes desafíos y la pesca sufra grandes pérdidas. La economía del Perú tendrá que depender más de sus recursos intangibles, como su cultura y su creatividad.
El segundo escenario es el opuesto al que acabo de describir, es decir, imaginemos que el cambio climático sigue siendo gradual, pero el sistema económico mundial se torna disfuncional y desordenado. Con esto los mercados de exportación del Perú se volverían débiles y el Perú tendría que ser más autosuficiente. Los mercados estarían fuertemente disputados por los demás. Perú tendría que competir en precio, calidad y fiabilidad. Esto requiere una excelente infraestructura y un buen conocimiento de los mercados extranjeros, con un gobierno fuerte y unas empresas peruanas sólidas, aunque el resto del mundo esté en una mala situación financiera.
La tercera posibilidad es aquella en la que el cambio climático fuera rápido y catastrófico, y así también el sistema financiero mundial se volviera disfuncional. Podríamos llamarlo un “escenario apocalíptico”. Sólo los países y las empresas más fuertes y más inteligentes prosperarían frente a la creciente competencia y la caída de los mercados globales. Sin embargo, al igual que durante la gran depresión de los años 30 del siglo pasado, a algunas organizaciones y personas todavía les podría ir bien.
El cuarto y último escenario es aquel en el que el cambio climático fuera gradual y el sistema financiero mundial funcionara adecuadamente. En muchos aspectos este sería el escenario más deseable, ya que los gobiernos, las empresas y las personas tendrían la capacidad de adaptarse al cambio climático, y podrían acceder a los recursos financieros necesarios para realizar ajustes.
Les dejo a ustedes la tarea de pensar en el papel que podrían jugar la paz social y la estabilidad internacional, la evolución demográfica y los avances tecnológicos en cada uno de los cuatro escenarios.
Acciones
Si los posibles escenarios futuros del mundo y del Perú están representados por esos cuatro entornos descritos, ¿qué acciones debemos considerar ahora (como individuos o familias y como organizaciones como la Universidad de Piura) para prepararnos? Podríamos desarrollar acciones específicas para cada escenario; sin embargo, dado que no sabemos cuál de los cuatro surgirá de hecho, ésta no sería una buena decisión. En lugar de eso, debemos identificar una estrategia que sea exitosa para los cuatro escenarios.
Para nosotros, como individuos, esta estrategia debe incluir la garantía de nuestra capacidad profesional, para ser competitivos a nivel mundial, con una amplia experiencia práctica (incluyendo experiencia de primera mano en los mercados internacionales) y poseer altos estándares éticos. Pues si bien queremos tener éxito como individuos, sólo podemos hacerlo si nuestros compañeros de trabajo y los miembros de nuestras comunidades también tienen éxito. Algo muy importante, motivarnos para pensar siempre en la adopción de medidas que se traduzcan en mejores resultados. En resumen, ser “innovadores”.
La estrategia que estoy sugiriendo para nosotros como individuos también se aplica a la Universidad de Piura. La Universidad, sus profesores, el personal y quienes la apoyan ya han demostrado que tienen muchas de las cualidades que acabo de describir. Ahora hay que pensar en la construcción de sólidos programas académicos y consolidar normas éticas para convertirse en una universidad que cumpla con los retos del futuro. Para ello será necesario que sus miembros tengan un conocimiento de primera mano del mundo y la innovación. Todas las universidades en el mundo están luchando con estos problemas. No hay ninguna razón por la cual la Universidad de Piura no pueda cumplir con este desafío mediante una cuidadosa planificación de hondo calado y la aplicación de planes estratégicos de largo alcance.
Conclusiones
En conclusión, permítanme animarles a todos ustedes, pero especialmente a nuestros graduados de hoy, a apoyar a la Universidad de Piura en los próximos años. Nuestro apoyo puede tomar muchas formas y les dejo a ustedes decidir, cuál es la forma más adecuada.
Nuestros graduados también pueden pensar en plantar otro plantón de algarrobo aquí en el Campus Lima para marcar su compromiso a largo plazo con la Universidad de Piura. Podrían reunirse en torno a este árbol especial –su árbol– de vez en cuando, para reflexionar sobre sus vidas y construir un futuro mejor.
Gracias y, otra vez, felicitaciones a todos.
C.M., Ph.D., P.Eng., EurIng, FCAE
Chair of Foresight, Alberta Innovates Technology Futures
President, Canadian Commission for UNESCO
Lección inaugural brindada en la Ceremonia de Apertura del Año Académico 2012, Universidad de Piura.
