En “Diálogos de Arquitectura”, organizado por el Programa Académico de Arquitectura, se evaluaron los retos de los futuros profesionales, a través de la visión de los expertos Carlos Palomino, Roberto Riofrío y Jorge Losada.
Por Tania Elías. 26 abril, 2016.
No solo la gravedad es la variable con la que los arquitectos actúan permanentemente. A esta se suma ahora la velocidad que convertirá a la ciudad en una ‘hiperciudad’, la que deben asumir los estudiantes como un reto, coincidieron en señalar como una de las conclusiones, los arquitectos ponentes.
En la actividad, que mostró el interés de los estudiantes al llenar las instalaciones del Auditorio IME, los expertos Carlos Palomino, Roberto Riofrío y Jorge Losada explicaron que esta velocidad cambia la idea de la ciudad como lugar aislado.
Carlos Palomino, decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Particular de Chiclayo, al dirigirse a los jóvenes les dijo: “El nuevo reto de los jóvenes es la velocidad. No tienen idea de cómo esta variable afecta la ciudad. Ustedes creen que se cambia a partir de un trazo cualquiera, geométrico, de gabinete, y eso es falso. Es la velocidad la que va a cambiar completamente la ciudad”.
Señaló que hasta hace unos años, cuando uno hablaba de una ciudad importante se refería únicamente a ésta, pero ahora las carreteras han cambiado esa situación. “Chiclayo ya no es solo Chiclayo, ahora es también Saña, Túcume, por la velocidad, y se va a seguir…”, agregó.
Comparó lo que ocurre en la tecnología con el desarrollo y planeamiento. “Las pistas se van a hacer más anchas; como ocurre con la banda ancha digital, así será en la parte física. La ciudad va a ser una hiperciudad donde todo va a estar conectado en minutos. Los andes ya están viniendo a la costa, porque están cerca… Uno viaja a un lado cada vez en menos tiempo”, mencionó.
Roberto Riofrío, profesor de Diseño Arquitectónico de la Facultad de Arquitectura de la UPC, de la Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL) y docente visitante en la Oklahoma State University (OSU), señaló también como reto, el momento importante en que los jóvenes van a ejercer la profesión.
“Se está comenzando a consolidar un nuevo movimiento de arquitectura, hay un mayor interés por lo que ésta puede aportar al desarrollo urbano. En los 80 no se hacía arquitectura porque no había mucha construcción. Era una generación que tal vez tenía la frustración de no poder construir y no poder hacer que sus diseños se llevaran a cabo. Esto ha cambiado”, comentó.
“Ustedes ya no están en la época en la que la arquitectura está estancada. Ya agarró una velocidad; además se conversa sobre cambiar la ley de los procesos públicos, hay grupos de arquitectura que se están moviendo, esos frutos los van a aprovechar cuando sea el momento de trabajar”, agregó.
Jorge Losada, arquitecto por la Universidad de Navarra y catedrático de la Universidad de Piura, dijo a los jóvenes que otro reto para ellos es su ciudad. “Piura tiene una serie de problemas estructurales, que tienen que ver con ese crecimiento expansivo”, indicó.
Mencionó que el reto es cambiar la ciudad a un ámbito más abstracto pero fundamental, relacionado con lo físico: el planeamiento en el desarrollo de la infraestructura. Aunque reconoció que la sinergia es difícil de lograr, confió en que a futuro se promueva el cambio.
En “Diálogos Arq”, una actividad que promueve la Universidad de Piura en torno a la reflexión de la arquitectura, también se hizo referencia a la necesidad de que el profesional se forme como gestor para promover sus proyectos, y con la presencia que vaya teniendo en el contexto, llegue a cambiar los modelos políticos relacionados con el desarrollo urbano.
