El 4 de julio, el doctor Gotuzzo, destacado médico especializado en enfermedades infecciosas y ganador del Premio Esteban Campodónico 2005, disertó sobre la importancia e impacto de las vacunas en la salud.
Por Daniela Cerna. 12 julio, 2019.En su presentación, Gotuzzo enfatizó que la vacunación no solo trae a la población beneficios relacionados con la salud, sino que tiene un fuerte impacto en la economía de una nación y en la calidad de vida de sus habitantes.
“Si me preguntaran cuáles son los 2 principales problemas a resolver en el Perú, diría que la implementación de agua y desagüe; y la vacunación de la población. Muchas enfermedades e infecciones tienen resultados a largo plazo, el 22% de cánceres del país están asociados a algunos microbios que las personas contraen”, comentó el especialista al introducir su ponencia.
Como parte de la lista de beneficios de la vacunación, Gotuzzo menciona la reducción de la mortalidad y la morbilidad, y la reducción de la carga financiera para el país, que ahorra hasta 30 dólares por cada dólar invertido en vacunas.
Asimismo, a lo largo de la charla el médico brindó algunos alcances acerca del tipo de vacunas necesarias y aptas según la edad de los pacientes y desmintió algunos mitos que giran en torno a la vacunación en niños, adolescentes y adultos; especialmente aquellos difundidos por grupos antivacunas, tan populares hoy en día en países de Europa y en Estados Unidos.
Prevención a toda edad
En el caso de los adolescentes y adultos jóvenes, Gotuzzo recomienda la vacunación para prevenir la hepatitis A y B, el tétano, la difteria, paperas, sarampión, rubeola y varicela.
Además, considera importante las vacunas contra el virus del papiloma humano, no solo en preadolescentes de 12 y 13 años, sino en adultos de hasta 26.
Entre los 50 y 64 años, se aconseja la vacuna contra la difteria, rubeola tétano y varicela. En el caso de los adultos mayores, a partir de los 65 años, son múltiples las inmunizaciones indicadas: difteria, hepatitis A y B, influenza, sarampión, meningococo, neumococo, tétano y varicela.
Algunos mitos antivacuna
Uno de los mitos más populares y más voceado por los grupos antivacunas es el enriquecimiento de la industria farmacéutica. el caso del Perú, las compras las realiza el fondo rotatorio de la OPS (Organización Panamericana de la Salud) y no las industrias farmacéuticas directamente.
Una segunda excusa, por la cual quienes la propagaron fueron penalizados en Inglaterra, fue la afirmación de que el timerosal (mercurio en su formulación médica) se asocia al autismo. Hoy se sabe que no existe ninguna asociación y que el timerosal se sigue usando para dosis múltiples.
De acuerdo a Gotuzzo, además de ignorar dichas creencias sin sustento científico, es necesario romper algunas barreras para promover el uso de las vacunas por personas de cualquier edad. Algunas razones por las cuales los adultos no se vacunan son la falta de recomendación de sus médicos, no saber dónde vacunarse, el temor a los efectos adversos, poco conocimiento del impacto de la prevención, o la simple creencia de que las personas “sanas” no necesitan inyecciones.
Asimismo, recomienda a la población en general no perder la oportunidad de vacunarse y a aquellos profesionales de la salud, como enfermeras, trabajar en conjunto para la promoción de las vacunas.
Sobre el especialista
El doctor Gotuzzo es un destacado médico peruano, especializado en enfermedades infecciosas (Infectología), quien se desempeña con éxito en la docencia universitaria y la investigación.
Es miembro activo de numerosas sociedades internacionales y ha sido presidente de la Sociedad Latinoamericana de Enfermedades Tropicales (2000‐2003); del Programa Científico IDSA (2000‐2003); del Comité Organizador Internacional del Congreso Internacional de Enfermedades Infecciosas (1994 a la actualidad); de la Sociedad Internacional para Enfermedades Infecciosas (1996‐1998); de la Asociación Panamericana de Infectología (API) Presidente de la Federación Internacional para Medicina Tropical (2005‐2008) Presidente de la Sociedad Peruana de Medicina Interna (1991‐1992).
Sus estudios se enfocan en el campo de la salud pública, concretamente en las enfermedades que pueden afectar a la población en general, como por ejemplo la tuberculosis, tifoidea, hepatitis, VIH/Sida, entre otras de reciente aparición.
El Premio Esteban Campodónico le fue concedido por su destacada labor como maestro universitario y sus valiosos aportes a la Ciencia médica y a la Salud pública peruana en el campo de las enfermedades infecciosas, así como por su gran competencia profesional y demostrada sensibilidad social.